El Espanyol visita de nuevo El Toralín, estadio de la SD Ponferradina y que está en los libros de historia del club blanquiazul. Y es que en el terreno de juego berciano llegó, la pasada campaña, el gol hasta el momento más rápido en la historia del primer equipo espanyolista. Landry Dimata mandó el balón al fondo de la red a los 10 segundos de juego en un duelo que los de Vicente Moreno acabarían llevándose por 1-4.
Llegaba el Espanyol al duelo ante la SD Ponferradina en El Toralín, correspondiente a la jornada 40 de LaLiga SmartBank, habiendo ascendido hacía dos jornadas en La Romareda y tras un tropiezo en casa contra el FC Cartagena (0-2) fruto de la relajación después de haber logrado el primer objetivo de la campaña. Lo hacía además con la ausencia de Raúl de Tomás y Adrián Embarba, dos piezas clave. Pero el equipo demostró rápidamente que lo acontecido la anterior jornada tan solo fue un tropiezo y que podía salir a flote sin sus dos grandes referentes.
Sacó de centro Óscar Melendo, retrasando el balón a un David López que le devolvió el cuero. El de Sant Adrià vio la incorporación de un Matías Vargas que había puesto el turbo y que, a su vez, vio a Adrià Pedrosa libre en el carril zurdo. El lateral puso un centro en el corazón del área al primer toque al cual Vargas no llegó a cabecear por poco, pero sí que lo hizo un Landry Dimata que, con una gran volea, superó al meta de la SD Ponferradina, Manuel García. El Espanyol se ponía por delante en el marcador a los 10 segundos, siendo la diana más rápida de la historia blanquiazul, el segundo de Segunda división desde que se tienen datos, el sexto de LaLiga contando Primera división y el 4.000 en los por aquel entonces 120 años del Espanyol.