Sergio González afirmó no estar nada contento con lo que vio en la primera parte, según él “la peor que hemos hecho hasta el momento en casa”, pero a la vez contento con la respuesta del equipo en la segunda mitad de juego, en la que apostó por cambiar el dibujo táctico y acertó. Su apuesta y el trabajo incansable de sus jugadores consiguieron salvar los muebles en el descuento. La suerte que tanto estaba faltando al final hizo acto de presencia y se unió al Espanyol en el último suspiro. Aunque tal y como remarcó el mister, la fortuna no viene sola y hay que buscarla: “En la segunda parte trabajamos infinito para tener esa suerte”.
Analizando lo que se vio sobre el verde, el de L’Hospitalet admitió que con el planteamiento inicial “éramos incapaces de ganar cualquier segunda jugada en el medio. Ellos transitaban con comodidad y nosotros no llegábamos a contrarrestarles defensivamente. Nuestra ayudas no funcionaban y ellos han dominado. Además, hemos salido contemplativos, a verlas venir. Pero con el cambio al 4-3-3 hemos igualado fuerzas, con más presencia en la medular, los rechaces han empezado a caer más de nuestro lado y hemos compensado lo que no estábamos haciendo tan bien en la primera parte y el premio ha llegado”. Si algo quiso destacar el técnico perico fue “el coraje, las ganas, la actitud, la intensidad y la lucha. El paso que ha dado el equipo hacia adelante”. A lo que añadió que “a partir de ahí se puede ganar, perder o empatar, pero ese es el Espanyol que queremos”.
Como viene siendo habitual, Sergio de deshizo en elogios cuando fue preguntado por Eric. “Creo que ha demostrado que es un jugador espectacular. Tiene una gran proyección y confío plenamente en él. Tanto que no le he tenido que animar más que al resto ni darle ninguna indicación especial, ya que tiene fundamentos de jugador de Primera y lo ha demostrado en el verde. Su partido ha sido muy bueno”, afirmaba un orgulloso técnico espanyolista. En cuanto al ambiente, Sergio reconoció que a los 18.978 aficionados que acudieron al estadio “es imposible reprocharle nada. Han estado a muerte con nosotros un día más y nos han apoyado con todas las ganas”.
Sergio admitió que este punto “da tranquilidad, a todos los estamentos” del club, de cara al parón de Liga. “Quiero recuperar algunas ideas y repasar algunos conceptos, como en el colegio. Ahora tenemos quince días de tranquilidad y confianza para trabajar mejor. A partir de entonces ya pensaremos en el próximo rival. Debemos hacer un ‘reset’ y a partir de ahí a tope”, apuntó.
Finalmente, cuestionado sobre si su principal meta antes de las fiestas navideñas es eludir los puestos de descenso, se ha mostrado muy calmado. “Este objetivo ni se me ha pasado por la cabeza”, afirmó un Sergio que, visto lo visto, acabó dando por bueno el punto conseguido ante los castellonenses.
Hemos pagado muy caro el no salir del todo enchufados al campo. La intensidad y lucha no puede faltar nunca y hoy nos ha faltado en algunos momentos del primer tiempo.
Tienes razón Jo Cantera. En un campo de fútbol nunca pueden faltar huevos y hoy han faltado en el primer tiempo.
Lo que ha quedado claro es que si quieren pueden. Así que hay que apretar un poco más el culo y salir a morder desde el primer minuto. Si jugáramos como en la segunda parte todos los partidos otro gallo cantaría.Tienen que dar más!