Se le pedía que diera más, que se arremangara por el equipo, que cogiera la batuta, que fuera un líder… Y lo ha hecho. Sergi Darder por fin brilla a todos los niveles y es feliz en el Espanyol, en su Espanyol. Una historia de amor larga, con un reencuentro, sufrimiento y de una vez por todas, alegría. El próximo paso ya saben cuál es, afrontar la renovación de un jugador que ha dado un paso al frente este curso y que acaba contrato con la entidad blanquiazul el próximo 30 de junio de 2023. Tal y como ha adelantado Quique Iglesias en ‘Esports COPE‘, la secretaría técnica blanquiazul va a sentarse con los representantes del de Artà para tratar de alargar su vinculación con el Espanyol.
Según dichas informaciones, los agentes de Sergi Darder se reunirán con el Espanyol pasado el próximo parón de selecciones, el cual tendrá lugar el último fin de semana de marzo, en el que España recibe a Albania en el RCDE Stadium en un encuentro amistoso. Darder llegó al Espanyol el curso 2017-18 a préstamo por el Olympique Lyon y que tras esa campaña la entidad perica se lo quedó en propiedad a cambio de ocho millones de euros.
“Sergi es un crack a todos los niveles. Lo podéis asociar a un tema técnico, pero también lo es a nivel físico y a nivel táctico es un espectáculo. Está a un nivel para lo que él quiera, si queréis hablar de selección, también. Estamos hablando de un jugador de mucho nivel, lo está demostrando cada semana y tiene margen de mejora. A nivel psicológico, donde en un momento determinado podía pensar que era más débil, se esta dando cuenta que también es un fenómeno. Tenemos un jugador bueno ahí”. Son las palabras de Vicente Moreno en rueda de prensa de hace unas semanas cuando se le pregunto por Darder, futbolista que suma tres goles esta campaña y que es, con 2.149 minutos, el sexto jugador más utilizado por el de Massanassa en liga, tan solo por detrás de Diego López (2.340), Cabrera (2.340), Sergi Gómez (2.194), Raúl de Tomás (2.206) y Adrià Pedrosa (2.186). Además, suma cinco asistencias, igualando su mejor marca en este aspecto, la cual logró en su primera campaña como jugador del Olympique Lyon, la 2015-16.
Madurez a los 28
El Espanyol es el tercer equipo como profesional de Sergi Darder tras pasar por Málaga CF y Olympique Lyon. Formado en la cantera blanquiazul, las puertas del primer equipo nunca se le abrieron y Josep Manel Casanovas (qepd) se lo llevó al club de Martiricos. Allí debutó en la élite y, dos campañas después, un grande como el Lyon apostó por él a cambio de 13 millones de euros. Pero después de tres cursos en Francia, el Espanyol volvió a aparecer y regresó, primero como cedido y tras esa campaña, en propiedad tras el pago de ocho millones de euros. “Tenía muchas ganas de volver, quería jugar en Primera división con el Espanyol. Tenía una espina clavada”, afirmó en su presentación.
Ya como jugador de la primera plantilla del Espanyol, Sergi Darder las ha visto de todos los colores: arrinconado en la banda por Quique Sánchez Flores, recuperado para la causa por Rubi y clasificándose para Europa, un duro descenso –“me quedé en el Espanyol por el sentimiento perico”, dijo en su momento– y el, quizás, momento más complicado, donde no estaba bien. “Toqué fondo, todo me afectaba demasiado”, reconoció tras superar el mal momento personal.
Pero Sergi Darder sabe de qué van estas cosas. Llegó al Espanyol desde su Artà natal con tan solo 13 años y pasó a vivir en la Residencia de Gran de Gràcia. “Cuando llegué era todo muy duro, mucho”, explicó en su momento a quien firma esta pieza. Pero con la ayuda de sus compañeros de piso y de la familia Clemente, encargada de gestionar la citada Residencia, salió adelante y demostró por qué el Espanyol lo había escogido. Tal y como está haciendo ahora, 15 años después de la primera vez que se enfundó la blanquiazul. Porque a sus 28 primaveras Darder brilla y disfruta del fútbol en el equipo de sus amores. «Me gustaría quedarme muchos años más», dijo hace pocas semanas. Que así sea. El primer paso, el encuentro con los agentes del jugador, ya está agendado.