El defensa reconocía que “la afición está muy dolida y nosotros aún más, pero no ha podido ser y nos vamos con la sensación de haberlo dejado todo y de que nos hemos merecido algo más. Por eso nos vamos muy dolidos por la derrota” e “indicaba que ahora no queda otra que intentar acabar bien contra el Celta”.
Pipa lamentaba que el Espanyol había tenido “más ocasiones y más claras que el Valencia en la primera parte” con las de Wu Lei y Raúl de Tomás y los balones estrellados al palo. “Esto resume la falta de pizca de suerte, una dinámica que arrastramos y creo que si llegan a entrar esas ocasiones, el resultado hubiese sido distinto, pero no nos vamos a martirizar más con lo sucedido hoy y como te dicho estamos muy dolidos y ahora toca esperar el siguiente partido”.
Contra el Celta, el canterano apuntaba que “daremos la cara, porque somos profesionales en todas las situaciones y sabemos que tenemos que acabar lo mejor posible. Queríamos dar una buena imagen a nuestra gente que es quien nos importa en estos momentos y no ha podido ser pero estamos satisfechos por el trabajo”.