Dejen entrar antes de salir. Este habitual lema se aplicará en el Espanyol en los próximos días. Una vez se confirme la salida de Felipe Caicedo, el club abordará la llegada de los refuerzos que aún están pendientes. Y entre los candidatos a reforzar el equipo sigue estando Diego Reyes. Pese a las dificultades que está poniendo el Oporto, en Cornellà no renuncian a él. Quique le quiere en su plantilla, pero el club ya trabaja en otras alternativas por si finalmente no se puede concretar su llegada.
Además, se intentará cerrar la llegada de otro central o un pivote defensivo, y un delantero de garantías que llegue para ocupar la plaza del ecuatoriano. En medio de todas estas operaciones, la entidad espanyolista sigue muy atenta al desenlace del conflicto contractual entre Dídac Vilà, que sigue entrenándose con el Reus, y el AEK de Atenas para cerrar su regreso al Espanyol o tener que ir a por otra opción.