Un gol de Puado en la prórroga fue decisivo para que el Espanyol siguiera adelante en la Copa del Rey pese a no realizar un buen partido ante el Llagostera. El canterano, que cerró la goleada ante el Logroñes, volvió a ver puerta y sigue haciendo méritos para ser un jugador importante en el equipo. Es cierto que la Copa ilusiona, pero en algunas ocasiones como ayer también puede desesperar. El equipo ofreció una imagen algo borrosa, y no solo por lo que ofrecieron sobre el verde, sino también por cómo lo tuvimos que ver por la televisión.
Vicente Moreno cambió todo el once que se impuso el pasado domingo al Logroñés. Solo cinco de los titulares en Llagostera tuvieron minutos en Las Gaunas, y no fueron muchos ya que todos salieron en la segunda parte. La Copa siempre motiva al espanyolismo, pero también a los equipos de menor categoría que se enfrentan a uno superior. Y eso pronto se vio. El Espanyol no quería especular, sino mandar desde el principio para evitar sorpresas. Wu Lei no tardó en avisar con un remate que salió alto, mientras que Vargas no llegó a un buen centro del atacante chino. Poco después, en el 13’ Fran Mérida estuvo cerca de sorprender a Marcos con un remate desde fuera del área. En pocos minutos ya habían dejado claras sus intenciones.
El Espanyol quería tirar de calidad para hacer daño ante un rival que no renunciaba a dar la sorpresa. Pero no todos estaban a la altura. Algunos no estaban aprovechando su oportunidad. Y la mayoría de jugadas en ataque pasaban por las botas de Embarba. Una gran acción de Matías Vargas acabó con un buen disparo del ‘23’ perico que obligó a estirarse a Marcos para evitar el primer tanto. El madrileño, con el brazalete de capitán, no se lo pensó al igual que un Fran Mérida que volvió a probar suerte desde lejos, pero su remate salió alto por muy poco. Pero en el fútbol a veces todo puede cambiar de un minuto a otro.
Oier, providencial
Y tras estas buenas ocasiones fue el conjunto de Oriol Alsina el que estuvo cerca de inaugurar el marcador. En el minuto 30, Pol Lozano derribo al experico Pere Martínez dentro del área. La eliminatoria podía empezar a ponerse cuesta arriba, pero Oier estuvo muy acertado y, con una gran estirada, evitó que Sergio Cortés transformara el penalti.
Con el susto aún en el cuerpo, el Espanyol se estiró un poco más. Se fue a por el gol y Embarba lo tuvo cerca en un lanzamiento lejano de falta que Marcos desvió estirándose. Los blanquiazules, de nuevo de amarillo, estaban teniendo oportunidades, aunque la más clara había sido para los de la Costa Brava desde los once metros. Pese a que el conjunto de Vicente Moreno lo había intentado de distintas maneras, se iban al descanso sin poder inaugurar el marcador al haberse topado con un rival muy bien plantado en el campo y con las ideas muy claras. Tocaba seguir picando piedra.
En la media parte, el técnico perico dejó en el banquillo a Embarba, el jugador más activo y peligroso del primer tiempo, pensando en el encuentro del domingo ante el Almería. Y David García no tardó en avisar con un trallazo que salió rozando el palo derecho del marco de Oier. El juego fue a menos. Estaba siendo aburrido con muy pocas ocasiones claras de gol. Y en medio del hastío, el Espanyol se quedó en superioridad numérica en el minuto 65’. Wu Lei cogió la directa y Monreal, que estaba siendo uno de los destacados en el conjunto local, vio la roja al zancadillear al atacante perico.
Puado decide ante un combativo Llagostera
Con un jugador menos al Llagostera se le empezaba a hacer largo el partido. Pero el Espanyol no supo aprovecharlo. Los blanquiazules querían incrementar la presión, pero no lo lograban. No llegaban con claridad y la primera ocasión con cierto peligro en el segundo tiempo fue de Melamed, cuando solo llevaba cuatro minutos en el campo, pero su cabezazo salió desviado. Sin chutar a puerta, el gol era imposible. El final del partido se acercaba y esto hacía que aparecieran algunas imprecisiones en los pericos. Sevensson y Nico Melamed tuvieron el gol en los últimos compases pero se toparon con el experico Marcos que estuvo muy acertado.
Todo quedaba abierto para la prórroga. Y pronto Puado acertó ante puerta. En el 94’ un perfecto centro de Miguelón lo cabeceó el canterano al fondo de las redes. Un gol que ponía por delante a los blanquiazules y alejaba algunos fantasmas del pasado. Y ni con el marcador a favor, algunos pericos pudieron brillar. Se pasó la eliminatoria, pero algunos le pusieron las cosas fáciles a Vicente Moreno.
Espanyol: Oier, Miguelón, Calero, Pujol, Dídac (Pedrosa, 90’), Pol Lozano (Keidi Bare, 76’), Fran Mérida, Jofre Carreras (Nico Melamed, 66’), Embarba (Puado, 46’), Matías Vargas y Wu Lei (Sevensson, 76’).
Goles: 0-1, Puado (94’)
Árbitro: Trujillo Suárez (comité tinerfeño)
Así hemos narrado en La Grada radio la parada del penalti por parte de Oier
La narración del 0-1, obra de Puado