Sin duda uno de los nombres propios del partido ha sido el de Sergi Darder. Primero por su pasado como jugador del Málaga y después, ya con el partido en marcha, por el tempranero gol que logró y que serviría para dar los tres puntos a los pericos ayer en La Rosaleda.
El mallorquín explicó ya en zona mixta que se iba “contento, por la parte que me toca” y por la primera victoria fuera, pero que “si había un partido en el que no quería marcar” era en este, ya que “ver a un equipo que quieres en esta situación no es agradable”. De hecho, una de las imágenes del encuentro fue la de Darder disculpándose ante el público de La Rosaleda por el tanto que acababa de marcar. Pero pese a ese respeto mostrado por el ahora jugador perico, una parte de la afición malacitana no dudó en pitarle cuando saltó al campo. En Málaga todavía escuece su marcha al Olympique de Lyon y Darder reconoció que la suya “no fue una salida fácil”, aunque matizó que “si se supiese la realidad de aquel traspaso, la mitad no me hubiera pitado”. El perico quiso quitar hierro a esas críticas, ya que cree que “son cosas del fútbol” y deseó “de todo corazón” que el Málaga se salve.
Para el ‘25’ perico fue muy importante saber gestionar el ambiente que se iban a encontrar en La Rosaleda. Darder dijo que fue una cuestión “vital” y que “sabíamos que los primeros 10 o 15 minutos eran prácticamente más importantes que los otros 75”; que si los locales “conseguían ponerse por delante, tendrían la afición con ellos”. En ese escenario, asegura que les hubiera costado más porque el Málaga “moriría en cada pelota”. Sin embargo, “hemos tenido la suerte de ponernos por delante y eso nos ha dado la vida, porque ellos se han puesto todavía más nerviosos de lo que estaban”.
Una de las claves del encuentro para el Espanyol fue saber administrar su ventaja. En este sentido, Darder considera que el equipo ha “aprendido de los errores. Nosotros tampoco estamos en una situación como para regalar y con el 0-1 hemos aprovechado para defender”. Pese a que la posesión era de los locales, lo cierto es que el equipo de Míchel no generó excesivos problemas. “Casi no han tenido ocasiones, aunque sí que nos han acosado y nos han metido en nuestra área. El año pasado fue prácticamente el mismo partido”, explicó un Darder que considera que ayer no permitieron que les hicieran ocasiones como sí ocurrió en otros partidos. “El equipo ha estado más sólido y cuando estamos unidos y juntos es mucho más fácil ganar”, concluyó el goleador de la noche.