Sin tiempo para más descanso la vuelve la competición de la Liga SmartBank con la disputa de la jornada 11, que comenzará a jugarse este mismo viernes con el Albacete – Leganés.
viernes 6 de noviembre
- 21:00 Albacete – Leganés
sábado 7 de noviembre
- 16:00 F.C. Cartagena – UD Logroñés
- 18:15 Mirandés – Real Sporting
- 21:00 Espanyol – Lugo
domingo 8 de noviembre
- 14:00 Sabadell – Málaga
- 16:00 Alcorcón – Fuenlabrada
- 16:00 Rayo Vallecano – Almería
- 18:15 Real Oviedo – CD Castellón
- 18:15 Mallorca – Ponferradina
- 20:30 Tenerife – Real Zaragoza
lunes 9 de noviembre
- 21:00 Girona – Las Palmas
Para el Espanyol, la cita es este sábado ante el Lugo, un equipo que como hemos ido repitiendo a lo largo de la semana está siendo la revelación en estas últimas tres semanas en que de la mano de su nuevo técnico Mehdi Nafti se han convertido en el equipo con mejor dinámica de la categoría. Todo un reto para un Espanyol que con 23 de 30 puntos sumados hasta la fecha ha comenzado la temporada como debía hacerlo para sentar las bases cara a su único objetivo, el del retorno a Primera. La plantilla blanquiazul y el cuerpo técnico que encabeza Vicente Moreno, sabedores de la importancia de firmar un buen arranque de curso, caminan con paso firme y de momento solo un equipo, el Sporting de David Gallego, le aguanta el ritmo con 22 puntos en su haber. Tras la pasada temporada en que los pericos batieron todos sus registros históricos negativos el cambio de mentalidad es evidente, y de su mano unos futbolistas que quedaron tocados por los avatares de un curso muy duro han recuperado una versión futbolística de alto nivel.
VM va superando de momento con éxito los retos que se ha ido encontrando desde su llegada el pasado verano: con una pretemporada muy breve y condicionada por la pandemia por el coronavirus fue capaz de llevar a los suyos a sumar una serie de buenos resultados que permitió llegar al arranque de curso sin las dudas que condicionaron ese mismo inicio un año antes con David Gallego. Justo antes del debut ante el Albacete, el preparador afirmaba que veía al equipo “ilusionado, con ganas y con buen tono físico. Llegamos con ganas de competir, que es lo más importante. El balance es positivo porque llegas a un sitio nuevo, uno tiene que adaptarse a lo que hay dentro y fuera del club y todo esto lo hemos hecho de forma rápida. El balance es positivo y estoy contento».
A lo largo de ese periodo, también ayudó y supervisó la construcción de la plantilla; aunque esa era una competència directa de Rufete, ya dejó claro durante su presentación que exigiría un bloque competitivo; además, intervino directamente en cuidar y mimar a algunes de las piezas claves de la plantilla que era prioritario mantener en nómina.
Otro de los retos superados fue conseguir cambiar la mentalidad del grupo de Primera a Segunda; así, sin paternalismos innecesarios, él y su cuerpo técnico pusieron especial hincapié a que el grupo asumiese su nueva realidad: “Todos tenemos que tener la humildad suficiente para saber que estamos en Segunda. Con mucha exigencia, de querer dejar un nivel alto. A todos los equipos que cambian de categoría les cuesta adaptarse, pero hemos intentado en esta pretemporada que lo tengamos claro. Es una cuestión de empezar, de ganar y reforzar todo lo que queremos transmitir”. Este cambio de chip es más que evidente en cada partido, y los futbolistas parecen haber asumido que con la historia, el escudo y el presupuesto no hay suficiente para subir.
Moreno, un hombre conocedor de la particularidad de las dinámicas competitivas en la categoría de plata, desde el principio puso especial hincapié en la necesidad de comenzar con buen pie en las primeras jornadas. “Es una categoría donde no hay tiempo para muchas cosas. Nosotros tenemos que intentar que todo vaya bien y que fluya desde el inicio”, insistía antes de comenzar el curso, y ciertamente el equipo ha despejado cualquier duda que pudiese existir al respecto de la adaptación del equipo a la categoría habiendo sumado ya un importante número de puntos que sitúa las proyecciones por encima del récord histórico de cualquier otro equipo en Segunda.
Escuchar el programa en Ivoox
Escuchar el programa en Spotify
Uno de los retos que más le ha costado superar es el del juego y el de enganchar a la afición; a base de repetir ese mantra de que el Espanyol era el equipo con más presupuesto de la categoría parecía que el juego de los blanquiazules debía ser preciosista, algo que a pesar de haber intentado en alguna ocasión al largo de su carrera nunca ha sido un sello de Moreno. Reflexionaba el preparador en su día, “los primeros que quieren que esto vaya bien son los aficionados. Cuando vean cómo va el día a día, que queremos estar a su altura, estoy convencido que me van a ayudar”, pero lo cierto es que no han faltado debates sobre el estilo, sofocados esos sí al menos de momento tras lo visto en la primera media hora ante la Ponfe y el triunfo demoledor en Málaga. Los seguidores blanquiazules, muy desencantados con el rendimiento de sus futbolistas en la pasada temporada, parece que por fin se están enganchando al juego del equipo y disfrutando de la manera en que están sucediéndose los buenos resultados.
Superados provisionalmente estos retos, falta uno, el principal, por el que lógicamente habrá que esperar, el de devolver al Espanyol a la élite: un objetivo que será suma de los anteriores y que determinará si la apuesta por “el señor de los ascensos” como familiarmente se denomina a Moreno fue o no la acertada.