Sorprendió Galca con su apuesta en el once inicial, puesto que contradecía un poco lo que había dicho en la previa del partido, ya que optó por poner en liza a un equipo conservador pese a haber dicho que defender está muy bien, pero que también hay que atacar. Pese a ello, su equipo presentó batalla y se avanzó en el marcador ante un Atlético que, al final, impuso su mayor calidad para decantar la balanza de su lado.
Tras la derrota, el técnico perico, en su análisis del partido, sorprendió haciendo autocrítica. Y es que reconoció que “tras marcar el gol no hemos sabido gestionar la situación. Hemos jugado directo en vez de ser pacientes y dejar salir para que se abrieran más. En este sentido no hemos acertado”. “Nos hemos equivocado jugando tan directo”, sentenció un preparador blanquiazul que lamentó que, “pese a que lo hemos hablado en el descanso”, eso no sirvió para que su equipo lo corrigiera en el campo.
Tal y como explicó el propio Galca, además de que el Atlético “tiene mucha calidad, es un equipo muy organizado, defensivamente va muy bien y son veloces a la contra, todo lo que habíamos de hacer para evitar que nos hicieran daño, como llevarles de un lado a otro o buscar profundidad, no lo hemos hecho”.
Los blanquiazules se contagiaron del juego rival y eso les pasó factura, puesto que perdieron de vista cuales eran las consignas que se habían marcado para tratar de frenar a los del ‘Cholo’. “Cuando les das espacios y entras en su juego, lo pagas. Ya se ha visto que ellos hacen muy bien y rápido las transiciones. Además, también interviene la calidad del jugador como en el segundo gol, ya que nos lo han metido sin mucho espacio, pero Koke ha puesto un gran pase y Griezmann ha definido bien”, aseveraba el técnico rumano.
Como ya dejó claro dando un paso atrás a su idea de fútbol alegre inicial, Galca ayer volvió a demostrar que más allá de la forma y otro aspectos, “la prioridad son los resultados”. Así justificó, entre otras novedades, “colocar a Javi López en el extremo para tapar la subida de Filipe”, dijo el míster, quién pese a optar por el pragmatismo para ir a amarrar resultados, apuntó que “aun así tuvimos ocasiones, pudimos marcar algún gol más y no ha sido así”. Aunque no pudo negar que con este tipo de apuesta es mucho más difícil poder generar peligro: “está claro que centrarse en defender y no dejar espacios, además de tener que estar por debajo en el marcador, hace que te cueste más llegar”.
En la segunda mitad, Galca apostó por mover banquillo, pero ni con estas el equipo reaccionó. Pese a ello, él aseveró que los cambios “sí que han dado lo que esperábamos, que era tener más amplitud, generar superioridad por banda y centrar más. Por eso hemos puesto a dos delanteros, se han quedado solo tres defensas, con un hombre por delante, y habían cuatro medios en el campo”.
Cuestionado por si le preocupa su renovación, el entrenador rumano del Espanyol dijo que “a mí lo que me preocupa es el tema deportivo, salvar al equipo y mejorar en todo lo que se pueda, nada más”.
Ya para terminar, otra de las preguntas obligadas era la nueva suplencia de Caicedo. Tema que Galca zanjó rápido al aclarar que el ‘20’ perico “todavía tiene algunas molestias y no queremos arriesgarnos a perderlo”.