Estas son las notas de los futbolistas del Espanyol tras encuentro disputado en el Wanda Metropolitano ante el Atlético de Madrid correspondiente a la jornada 32 de LaLiga Santander. Los blanquiazules han perdido este partido por 2-1 a causa de un penalti muy polémico que ha transformado Carrasco en el minuto 100 de partido.
Sobrio. Tuvo un par de intervenciones en la segunda parte en las que estuvo acertado. Quizá pudo hacer algo más en el primer gol rojiblanco.
Tocado. Acabó con problemas musculares la primera parte y ya no salió tras el descanso. Su condición física le mermó. Se las tuvo que ver con Lodi.
Fiable. Se le vio con confianza. Se situó en el eje de la zaga, dando apoyo también al flanco derecho. Sacó balones, pero sufrió un poco a la carrera.
Cierre. Volvía a la titularidad tras cinco partidos fuera. Se situó en el centro de la zaga en defensa de cinco y cumplió como último hombre cuando se le requirió.
Contundente. Tuvo la primera ocasión en el 6’. Mandó en el juego aéreo, ganando la mayoría de duelos. Su cabeza parecía tener un imán para la pelota. Determinante en los balones colgados por parte del Atlético de Madrid. Aportó seguridad en la línea defensiva en una plaza nada sencilla y fue clave para anular el juego colchonero en el último tercio del campo. En general, toda la zaga jugó a un gran nivel –sobre todo en la primera parte–, pero el trabajo del charrúa sobresalió por encima del resto.
Constante. Buen partido en tareas defensivas del lateral, que frenó las entradas de Llorente y Vrsaljko. Le faltó aportar algo más en ataque. Se marchó tocado.
Liberado. El hecho de jugar con tres centrales le permitió tener más libertad de movimientos. Aguerrido como siempre, acabó un par de veces por los suelos.
Diferencial. El balear fue el factor más desequilibrante del Espanyol en ataque. Buscó los pases largos y provocó la expulsión de Kondogbia. Buena conducción.
Peleón. Trabajo sucio en el centro del campo del holandés, que jugó más centrado de lo que es habitual. Recuperaba la titularidad y se mostró participativo.
Dinámico. Aunque no estuvo todo lo acertado que hubiera querido, se movió muy bien por todo el campo, buscando siempre ayudar y echar un cable a los demás.
Protagonista. Para lo bueno y para lo malo. Marcó el gol del empate e hizo el penalti que trajo la derrota. Antes de la locura de la segunda parte se le vio poco activo.
Acelerado. Señalado en el 1-0, le excusa que venía de centrar a Darder.
Apoyo. En el momento más difícil, le tocó controlar la medular.
Difuso. Poco lucimiento. Tampoco estaba el partido para ello.
Veloz. Buscó el desequilibrio saliendo en velocidad.
Testimonial. Sustituyó a Pedrosa y no tuvo excesivos problemas.
Defensivo: Saliendo con tres centrales, redobló su apuesta por salir fuertes atrás y a partir de ahí buscar las ocasiones en ataque. Tras el descanso, hubo los cambios lógicos según los hechos del partido.