El futuro de Oier Olazábal, portero del Espanyol, sigue siendo una incógnita a día de hoy. Según ha podido saber ‘La Grada’, el club blanquiazul todavía no ha comunicado al vasco si tiene intención de seguir contando con él de cara a la temporada que viene. El vasco llegó al RCDE en 2020 y firmó un contrato que se extiende hasta el próximo 30 de junio. No obstante, el acuerdo cuenta con una cláusula que permite que el vínculo entre ambas partes se extienda hasta 2023 en caso de que la entidad perica lo estime oportuno. De momento, el Espanyol no ha dado pistas sobre si ejercerá o no el año opcional del contrato de este futbolista.
Seguramente, el futuro de Oier Olazábal dependerá bastante del portero que fiche el equipo blanquiazul para suplir la marcha de Diego López y del coste que tenga esta operación. En caso de que la dirección deportiva del RCDE opte por un meta con un precio y un salario algo elevados, Oier podría salir del club y Joan García completaría el elenco de cancerberos del primer equipo. Hay que tener en cuenta que la ficha del vasco es más alta que la del canterano. Por el contrario, si la directiva espanyolista se decanta por un refuerzo más económico para la portería, el Espanyol podría asumir la ficha del irunés y buscar una cesión a Joan García.
Una hipotética marcha de Oier Olazábal obligaría al RCDE a pagar una indemnización de 30.000 euros al jugador. El acuerdo que firmó el portero con el Espanyol estipula que la entidad deberá hacer frente a dicha penalización si no ejerce el año opcional que figura en el contrato del vasco.
Oier Olazábal ha jugado como perico durante las últimas dos temporadas y media. En este período de tiempo, tan solo ha disputado nueve partidos, ya que siempre ha ejercido el rol de suplente. Este cancerbero comenzó la última temporada como tercer portero, pero acabó jugando dos partidos ante los problemas físicos de Diego López y las dudas que generaron algunas actuaciones de Joan García.