Hablar de José Rojo ‘Pacheta’ es hablar de una de las épocas doradas del Espanyol. De uno de los últimos ascensos a Primera división, de participaciones europeas y de mirar a la cara al FC Barcelona. El de Sales de los Infantes vistó la blanquiazul cinco campañas, de la 1994-95 a la 1998-99, donde su trabajo incansable en el centro del campo lo convirtió en uno de los futbolistas fetiche de la afición blanquiazul. Hasta tal punto que tiene su nombre en la puerta 94 del nuevo estadio perico.
Tras su paso por el Espanyol, Pacheta recaló en el CD Numancia, club en el que colgó las botas en la temporada 2004-05. Antes tuvo tiempo de visitar al que fue su equipo: la última vez fue el 7 de enero de 2001, cuando el Espanyol se llevó el encuentro por dos goles a cero en el Estadi Olímpic de Montjuïc. Desde entonces, un Pacheta que en ese duelo jugó los 90′ no ha vuelto a visitar al Espanyol. Y desde entonces han pasado más de 20 años.
Como entrenador, Pacheta no lo ha tenido fácil. Tras comenzar su carrera en CD Numancia y pasar por los banquillos de Real Oviedo y FC Cartagena, tuvo una aventura en el Korona Kielce polaco y, tras un breve paso por el Hércules CF, parecía desaparecer del mapa futbolístico español al recalar en el Ratchaburi CF tailandés. Pero el Elche CF lo rescató y su buen hacer lo convirtió en uno de los entrenadores de moda. SD Huesca y actualmente Real Valladolid han sido sus últimos banquillos.
En un banquillo, Pacheta solo se ha enfrentado en una ocasión al Espanyol. Fue en la campaña 2008-09, cuando los blanquiazules visitaron Los Pajaritos para medirse al CD Numancia, en un duelo en el que hubo caravana perica y acabó con empate a cero, con gol mal anulado al central Sergio Sánchez. Ha sido, junto a la campaña 2020-21, la única que ha dirigido en Primera división. En esta última, pese a eso, cogió las riendas del SD Huesca en la jornada 19 en sustitución de Míchel y el Espanyol ya había jugado los partidos de la primera y la segunda vuelta ante el conjunto oscense.
“Siempre es especial, allí pasé cinco años maravillosos”, reconoció Pacheta en la rueda de prensa previa al Espanyol – Real Valladolid, afirmando también que es un “tremendo orgullo” tener una puerta en el RCDE Stadium. Pacheta, que en alguna ocasión ha sonado para ocupar el banquillo del Espanyol, visitará por vez primera como míster a un equipo en el que pasó algunos de los mejores años de su carrera. El burgalés conocerá la nueva casa perica y, al fin, su puerta. Pase lo que pase, la ovación está asegurada.