En el Espanyol, dónde se ha dado un gran paso en todas las estructuras de la entidad, hay mucha preocupación por cómo se están abordando algunos asuntos médicos y los casos están en estudio según adelanta el diario Sport. Si el año pasado Arbilla se perdió casi toda la temporada por culpa de unas molestias físicas, tras someterse a un tratamiento conservador durante varios meses antes de ser operado, la historia podría repetirse esta temporada con Leo Baptistao, uno de los jugadores llamados a ser importante en el once de Quique que está de baja desde el pasado 11 de diciembre. Además, Víctor Sánchez no juega desde hace un mes y su lesión se está alargando bastante más de lo deseado.
Según informa este periódico, la intención de los responsables de la entidad es analizar lo que está pasando y tomar decisiones. Y estas apuntan a que habrá cambios en la parcela médica