Este partido será clave para ver si el refrán popular ‘muerto el perro, se acabó la rabia’, es aplicable a la situación que ha vivido estos días el Espanyol. Y vaya por delante mi admiración hacia Sergio y mi indignación por lo acontecido.
Con el cambio en el banquillo ya no hay excusas que valgan. La entidad ha movido ficha y ahora son los jugadores, principales culpables de que la situación marche bien o mal, a los que le toca responder. Reenganchar a la parroquia perica es su asignatura pendiente y este es un buen momento para hacerlo. Muchos pensarán que, con entrenador nuevo, victoria segura, y habrá que esforzarse para que así sea y, como mínimo, cerrar el 2015 ante la afición, año marcado por los altibajos, con un buen sabor de boca. La pelota está en el tejado de los futbolistas y habrá que ver si consiguen acabar con los silbidos y las dudas, y logran, de una vez por todas, que las gradas de Cornellà vuelvan a presentar una buena imagen, que ya va siendo hora.
Con toda la artillería
Para el que será su segundo examen y estreno en Liga, Galca ya adelantó que saldrá con todo, fiel a su apuesta ofensiva, en el choque en que espera empezar a dar motivos para que el equipo se reconcilie con la afición. Así pues, todo apunta a que Caicedo, Gerard Moreno y Marco Asensio volverán a comandar el ataque blanquiazul, ayudados por un Burgui que tiene muchas opciones para ser, otra vez, de la partida y demostrar, así, su valía. En cuanto al resto, Pau estará bajo palos, Javi López actuará en el lateral derecho, Álvaro y Roco liderarán el eje de la zaga con Duarte por la izquierda y el doble pivote lo formarán Víctor Sánchez y Pape Diop. Así pues, el once ante Las Palmas será exactamente el mismo por el que apostó Galca en la Copa y que logró el pase a octavos.
El principal reto del conjunto blanquiazul será mostrar síntomas de mejora ante un conjunto canario que viene a por un triunfo que les ayude a salir del descenso y a coger aire. Algo que aún le hace más peligroso. Los pericos son conscientes de ello y habrá que ver si son capaces de romper la mala racha ante equipos inicialmente asequibles. En Cornellà ya se ha fallado ante Sporting, Granada y Levante, y hoy no se puede volver a perdonar. El cambio que tanto se pedía ya se ha producido y ahora toca que en el campo haya algún atisbo de ilusión. Por favor, volvernos a ilusionar y a darnos motivos para creer. Estáis en deuda con la grada.