Durante el mes de septiembre, en más de una ocasión, Quique Sánchez Flores manifestó que había varios jugadores que por culpa de las lesiones estaban fuera del nivel que se esperaba y que en la plantilla no habría auténtica competencia hasta el mes de octubre, cuando la mayoría habrían alcanzado el tono físico idóneo para competir. Pues ese momento ya ha llegado.
El técnico, con la recuperación de Víctor Sánchez, el único jugador que quedaba en la enfermería, por primera vez en toda la temporada tendrá a todos sus futbolistas en condiciones de ser alineados. Y ahora se le presenta un auténtico problema, ya que cada semana deberá descartar a un mínimo de siete jugadores.
Tras las recuperaciones de Óscar Duarte, Javi López y Marc Navarro, el de Rubí, que podría estar para el partido de Anoeta, el jueves se reincorporó a la dinámica del grupo al superar su lesión de grado uno en el gemelo de la pierna izquierda que le ha impedido disputar los dos últimos compromisos ligueros.
Jairo, sin dorsal, es el único jugador que en estos momentos sigue recuperándose de una lesión.