Raúl de Tomás es un líder y la rueda de prensa ofrecida este jueves día 27 de mayo es una muestra inequívoca de ello. El ariete perico reconoció que pelearán por el título en Alcorcón y que pese a que hacerse con el Pichichi no le obsesiona, le hace “mucha ilusión. Soy un ganador y es algo que quiero conseguir”. Explicó sin tapujos que el equipo, pese a haber logrado el objetivo principal del ascenso “lo ha pasado muy mal durante toda la temporada”, y además mostró una gran honestidad al asumir su cuota de culpa por el descenso: “Tras la cuarentena personalmente no estuve al nivel que tenía pensado. Vine para ser importante en el proyecto y no estuve a la altura”. Y esa espinita clavada es la que le motivó a quedarse y a guiar, a base de goles, al Espanyol hacia Primera división.
El título en juego: Nosotros somos los primeros que queremos ganar y conseguir el título por la gente. Lo vamos a intentar. Es obvio que la cabeza, una vez logrado el objetivo principal puede desconectarse un poco. De hecho, los últimos resultados no han sido positivos, pero que nadie dude de que iremos a Alcorcón a ganar el título.
Cómo ha vivido esta temporada 2020-21: Ha sido un año bastante duro en lo personal y colectivo. Los resultados han ido acompañando y eso puede engañar un poco, porque no ha sido fácil, ha sido duro. Pero el equipo ha aprendido tras haber caído y al final sacamos una lección positiva. Desde el minuto uno de la temporada hemos sido muy conscientes de lo que teníamos que lograr y se ha conseguido.
Futuro como perico: Tengo contrato y estoy contento aquí. El objetivo era volver a Primera y el próximo año estaré aquí, claro que sí.
Título y pichichi: Todos queremos conseguir el título, porque somos ganadores, pese a saber que el objetivo principal era ascender, pero una vez logrado ahora se genera la necesidad de título. Y está bien y se peleará, pero no nos olvidemos de lo conseguido. Intentaremos sacarlo por nosotros y por todos.
Mejor momento de la temporada: Hemos disfrutado de varios, especialmente al final, cuando sabíamos que podíamos logrado. Nos poníamos esa presión de subir cuanto antes a Primera división, pero lo disfrutamos tras un año que, como decía, ha sido muy duro. Pero salimos beneficiados en muchos aspectos. El equipo ha mejorado muchísimo y eso hay que plasmarlo el próximo año.
Celebración del ascenso confinado: Las primeras horas se pasa peor, por el hecho de asimilar que no vas a estar con tu equipo en Zaragoza. Y quiero aprovechar públicamente para agradecer al club cómo gestionó todo, me sentí muy involucrado en la celebración. La afición se acordó de mí y fue un día muy emotivo, pese a estar confiando, gracias a mis compañeros.
Vino a hacer historia: Lo dije y las cosas no salieron como quería, era consciente de que si me quedaba sabía lo que debía conseguir. Me quedó una espina clavada, porque vine con la intención de salvar al equipo y realmente tras la cuarentena yo, personalmente, no estuve a la altura de lo que tenía pensado. Era importante en ese proyecto y eso repercutió en la trayectoria del equipo. Y me quedé para sacarme esa espina y la mala sensación de no haber dado lo máximo para evitar la caída.
Ganar el Pichichi: El sueño no me lo quita, pero soy un ganador y es algo que quiero conseguir. A parte de lo grupal también quiero lograr cosas a nivel individual. Voy a ir a Alcorcón con el objetivo de quedar campeón pero si yo me centro en el mío, ayudaré al equipo. Es algo que va de la mano y es lo que trataré de hacer.
Jugar con Dimata: Hay que adaptarse a todo, da igual con quién juegue, al final todos nos movemos mucho por el campo y Melendo juega de una forma y Dimata de otra. Lo importante es cuando juguemos hacerlo lo mejor posible y explotarlo en el campo.
Confección de plantilla: cada temporada la gente va y viene. E igual que yo vine para sumar, si el club trae a gente que venga para sumar, la recibiremos con los brazos abiertos.