100% espanyolismo. Eso fue lo que se respiró en el acto de presentación de la renovación de Sergi Darder hasta 2026. Un acto en que el gran protagonista, acompañado por su familia, dejó patente, más que nunca, su gran sentimiento blanquiazul. Y es que más allá de su declaración de amor eterno hacia el Espanyol, el de Artà recalcó en varias ocasiones que cree en el proyecto: “Soy el primero que está seguro de que, si el club es grande, aún lo será más”.
Sergi Darder, además de ser un gran futbolista, un ídolo y referente, así como la piedra angular de este proyecto que se está construyendo, es también una gran persona. Es agradecido y demostró ser alguien muy comprometido. No dejó pasar la oportunidad para acordarse de alguien muy importante para él en su etapa de formación, Josep Manel Casanova. También tuvo buenas palabras para Vicente Moreno o para Mr. Chen, allí presente tras su llegada a Barcelona. Jugadores y jugadoras de la cantera allí presentes en el RCDE Stadium, en una sala presidida por una enorme lona donde se podía leer ‘Darderismo’, tuvieron delante suyo a un espejo en el que mirarse. A un Darder que se prestó personalmente en ayudarles cuando lo necesitaran. A un futbolista que incluso llegaba a decir que “quiero implicarme mucho más en lo que pasa en la Dani Jarque. Todos los jugadores pueden contar conmigo para lo que sea”.
Ha habido un tiempo de reflexión, como dijo Domingo Catoira, para que Sergi Darder tomara una decisión. Le dieron su espacio para valorarlo todo, y es que encima de la mesa, como reconoció su propio padre para este medio, ha llegado a tener cinco y seis ofertas económicamente superiores sobre la mesa. Pero como dijo el propio protagonista, “en ningún lugar seré tan feliz como aquí. Desde el primer día de la pretemporada lo tuve claro. Solo valoré quedarme aquí”. Consideró al Espanyol su casa. De donde tuvo que salir muy a su pesar, para luego regresar más tarde. Algo que se pudo visualizar en un vídeo muy emotivo en que repasaba toda su carrera desde que salió de su Artà natal hasta llegar a día de hoy.
Llevando la esperanza y la fe por bandera, ya saben, el Darderismo, Sergi Darder deseaba que “cada año sea mejor. Veo un proyecto muy ilusionante, porque lo que veo cada día es espectacular”. A lo que añadió que cree que “es un momento importante para el Espanyol y seguro que creceremos. Ya sabéis como soy, me guio por las sensaciones, y ahora mismo son buenas. Se están haciendo bien las cosas”. “Por lo tanto, si he renovado es porque estoy contento con lo que tenemos”, sentenció.
Se le preguntó a Darder por objetivos, por qué es el Darderismo a día de hoy, pero no quiso puntualizar alegando que “ponerte una meta sería irreal. El Darderismo ahora mismo es no poner freno, tenemos un margen de crecimiento brutal. Tenemos jugadores con un proceso de adaptación. Intentaremos hacerles entender qué es el Espanyol”. Y en este sentido hay alguien que, como en su renovación, tiene un papel muy importante: “La llegada de Diego Martínez ha sido clave. De hecho he mantenido muchas conversaciones con él y me ha ayudado a tomar esta decisión. Es un gran entrenador”.