Los datos del INE (Instituto Nacional de Estadísticas) indicaron que en 2020 en Solares (Cantabria) vivían 3.989 personas. Su equipo de fútbol, un SD Solares que milita en Segunda Regional, se fundó en 1968. Un club joven y una localidad pequeña que, evidentemente, esperan con la máxima ilusión el momento de enfrentarse a un histórico de Primera división como es el Espanyol. De hecho, los vecinos y sus negocios ya se visten de gala para la ocasión. Pero nada de trajes y corbatas. Esto va de pasión y corazón. Mejor de rojo y azul (sí, su paleta es la misma que la de los culés). Globos y cintas. Escaparates plagados de decoración para creer que todo es posible. También toca presentarse formalmente ante los miles de ojos que acaban de descubrir esta localidad. Llámenle curiosidades. Una información de gran utilidad dirigida a usted, apreciado seguidor perico o curioso en general.
Balones a la autovía
De los 116 kilómetros que tiene la Autovía del Cantábrico, la A-8, una serie de metros de su puente tienen a sus pies el campo de La Estación. Y no es que los automóviles vean de refilón el verde. Para nada. Una pelota despejada a excesiva altura, o un disparo terrible, podría iniciar un particular viaje por el arcén cántabro. Así de cerca queda. Una estampa probablemente sorprendente e impresionante para todos aquellos acostumbrados a construcciones deportivas enormes plagadas de puertas de entrada y un sinfín de pasillos, vomitorios y focos con luces de colores.
Viaje a Mordor
El prólogo de ‘El Señor de los Anillos: La Comunidad del Anillo’ menciona lo siguiente: “En la tierra de Mordor, en los fuegos del Monte del Destino, el Señor Oscuro Sauron forjó en secreto un anillo Maestro que controlara a todos los demás”. El mítico país de J.R.R. Tolkien puede ser más real de lo que uno puede llegar a pensar. El gran ojo de Sauron en lo alto de una torre coronando una montaña ubicada en Solares. Pero no es propiedad del antagonista de estos magníficos libros y películas, sino del Banco de Santander. La entidad tiene aquí la sede central que coordina el resto de las oficinas de alrededor del territorio nacional y extranjero, y el propio club ha publicado en sus redes sociales antiguas tiras cómicas donde Frodo y Sam confirman la similitud, pero, a su vez, confiesan haberse perdido en la búsqueda de las tierras del Señor Oscuro.
Cantabria, diez años después
La última vez que el Espanyol jugó un partido en Cantabria data del 22 de octubre de 2011. El rival fue el Racing de Santander en la novena jornada del campeonato liguero, y los pericos se llevaron una victoria por la mínima, 0-1 con gol de Sergio García. En el once de los locales destacaban nombres como Marc Torrejón, Álvaro González, Óscar Serrano, Pape Diop o Christian Stuani, además de Bernardo Espinosa en las filas del cuadro cántabro, pero no tuvo minutos. Lamentablemente para los intereses de la afición del Sardinero esa misma campaña el equipo descendió a Segunda división como colista, empezando así el paso por los infiernos recorriendo categorías que, por prestigio, no deberían haber pisado. Ahora, tantos años después, un nuevo contrincante de esta comunidad autónoma se planta delante del Espanyol. Esta vez con ganas de dar la sorpresa y de seguir disfrutando de la Copa del Rey. Una ruta de globos en escaparates, autovías vecinas del estadio y Sauron gobernando unas verdes tierras de Mordor.