Ha conseguido Rubi en poco más de un mes de trabajo trasladar su idea de juego ofensivo y asociativo a los jugadores del Espanyol. El equipo gusta y se gusta, se divierte jugando y, lo más importante, ganando. Seis victorias en seis partidos con seis dianas en contra y 16, más del doble, a favor, los cuales han sido anotados por diez futbolistas diferentes. Unos números más que positivos que se ven refrendados con las buenas sensaciones que transmite el equipo.
En cuanto a nombres propios, está claro que este equipo baila al ritmo de Darder, el que más minutos ha disputado en la presente pretemporada. Rubi le ha dado galones al mallorquín para que sea el guía del Espanyol y el balear ha recogido el guante: crea y golea, siendo el máximo realizador de la preparación con tres tantos junto al hasta el momento único refuerzo del equipo, Borja Iglesias. El ‘Panda’ no está defraudando y muestra maneras de killer, además de hacer jugar al equipo gracias a su buen juego de espaldas a portería. Otro de los hombres a destacar está siendo Álex López, décimo futbolista con más minutos a pesar de ser uno de los jugadores que asciende del filial. Podría salir cedido, aunque su buena pretemporada puede hacer que se haya ganado un puesto en el equipo. También vale la pena citar a Puado, que ha demostrado tener mucha hambre con sus dos dianas.
Controlando los partidos
La idea de Rubi es muy clara: tenerlo todo bajo control. La filosofía de tener el balón cuanto más tiempo posible mejor está grabada a fuego en la mente de los jugadores, aunque eso no impidió que en los primeros tres amistosos el rival se pusiera por delante en el marcador y el equipo fuera a remolque.
Trabajando la defensa y la salida del balón, el equipo ha mejorado y tan solo ha cedido una diana en los tres últimos encuentros.
Sacar la pelota jugada parece innegociable para el míster. Será una de las máximas de este Espanyol que, según lo visto, se va a mover entre el 4-4-2 y el 4-3-3, pudiendo acudir en momentos puntuales al 4-2-3-1. Aún así, más que de sistemas, el juego del equipo se va a tratar de movimiento constante de jugadores: laterales profundos e interiores que se sumen al ataque.
La figura de Marc Roca
El de La Granada del Penedès volverá a cobrar importancia con Rubi. Con el 4-3-3 lo hemos visto un poco más atrasado que los pivotes, haciendo de primer enlace entre la defensa y el ataque. Una posición en la que ya actuó con David Gallego en el filial y en la que se siente más que cómodo. El canterano desborda confianza y puso la guinda a su buena pretemporada anotando su primer gol como jugador del primer equipo.
¡Qué el ritmo no pare!
Una de las ideas más repetidas por los jugadores esta pretemporada es la intensidad de los entrenamientos, sobre todo los físicos los primeros días. Ello es primordial en la idea del entrenador, puesto que quiere un equipo con ritmo alto que, en caso de pérdida, presione desde el primer minuto para recuperar el balón cuanto antes. El juego asociativo que propone este Espanyol necesita de un buen fondo físico, y no hay duda de que los jugadores lo tienen. El equipo no ha parado de correr, pero siempre con sentido, en los partidos de preparación.
La estrategia
Se lleva trabajando desde el primer día pero no se vio hasta el último encuentro. Dos de los tres goles ante el B. M’gladbach llegaron así y ha de ser un arma importante en este Espanyol. Que todo ello se traslade a la liga.