Ya ha empezado la cuenta atrás para la reaparición de un Anaitz Arbilla que está pasando por un calvario por culpa de una tendinopatía en el Tendón de Aquiles de la pierna izquierda. Dolencia por la que finalmente, después de probar una infinidad de tratamientos que no han dado el resultado esperado, ha tenido que pasar por quirófano. Lo hizo este martes en ‘The Princess Grace Hospital’ de Londres, por el doctor sueco Hakan Alfredson, que estuvo acompañado por el jefe de los servicios médicos del Espanyol, Toni Turmo, y todo salió como se esperaba. Por lo que ayer jueves, ya de vuelta a Barcelona, el ‘23’ perico ya acudió a la Ciutat Esportiva Dani Jarque para someterse a una visita de control, que se irá repitiendo durante los próximos días hasta que pueda comenzar a trabajar la próxima semana de manera diferenciada junto a un fisioterapeuta y un recuperador del club. Se estima que el proceso de rehabilitación dure aproximadamente tres meses, por lo que si todo va por el buen camino, el lateral diestro blanquiazul estará, sin problemas, en perfectas condiciones para iniciar la pretemporada de cara al próximo curso junto al resto de sus compañeros.