El futbolista del Espanyol Wu Lei tiene prohibido hacerse tatuajes a partir de hoy si quiere seguir siendo internacional con la selección de China. La Administración General de Deportes de China ha establecido una serie de nuevas normas con el objetivo de que los futbolistas sean «ejemplos positivos para la sociedad». Una de las directrices más curiosas que ha introducido el gobierno chino es la prohibición de los tatuajes entre los integrantes de la selección nacional.
Esto no va a ser un problema para Wu Lei porque el futbolista del Espanyol no lleva ningún tatuaje. Pero como tuviera pensado hacerse alguno, ya se puede ir olvidando si quiere seguir siendo la estrella de la selección China. El problema lo tienen otros futbolistas del combinado asiático que sí que llevan tatuajes como Zhang Xizhe, jugador del Beijing Guoan, o Zhang Linpeng, defensa del Guangzhou FC que se ha vinculado con el Espanyol en diversas ocasiones . La Administración General de Deportes de China ha «recomendado» a estos jugadores que se borren todas las marcas de tinta de su cuerpo. Además, el gobierno chino ha prohibido que las selecciones sub-20 convoquen a futbolistas tatuados.
Algunos ciudadanos chinos a través de sus redes sociales han concebido esta medida como una maniobra del gobierno para tapar que la selección va a volver a quedarse fuera del Mundial. Diversos internautas consideran que la Administración china quiere hacer ver que el combinado nacional sirve para educar pese a no lograr sus objetivos deportivos. China ocupa el quinto lugar en su grupo de la fase de clasificación para la Copa del Mundo del 2022. La selección de Wu Lei está a seis puntos de alcanzar el tercer puesto, que da acceso a la repesca. Tan solo quedan cuatro partidos de esta fase por jugarse. Por tanto, parece muy difícil que la selección china de la vuelta a esta situación.
"Ejemplos positivos para la Sociedad". Manda narices. No llevo tatuajes, ni pienso llevar nunca, pero de ahí a confundir la magnesia con el tocino, como hacen los mandatarios chinos, media un abismo. Entre estos, los yanquis y los rusos, no me extraña que el mundo vaya como va.
Molt interessant…
Aprovecho la noticia para decir que no me gustan los tatuajes, pero que un día, hace unos cuantos años, prometí que si el Espanyol ganaba alguna vez la liga o una UEFA LEAGUE, me tatuaba al periquito, jejeje. Espero tatuármelo algún día, aunque como he dicho; no me gustan.
Llamadme antiguo, pero comprendo el fondo de la idea. Ves a los futbolistas y dan auténtica vergüenza ajena. Unos peinados lamentables, unos tatuajes de presidiario y unas pintas de cani analfabeto (la mayoría es lo que son) con las que demuestran que no serían capaces de trabajar ni en un Burger King.
Normal que el gobierno chino no quiera que sean el ejemplo a seguir por sus jóvenes. El problema lo tenemos aquí. Los chinos ya han demostrado muchas veces que tontos no son.