El que fuera primer entrenador del Espanyol en la era Chen Yansheng, Quique Sánchez Flores, ha concedido una entrevista a Esports Cope en la que ha repasado la actualidad futbolística. El preparador en su día calificó la propuesta de Rastar como un “proyecto fantasma”, señalando a la propiedad como responsable de esa falta de estructura y visión; unas palabras que, en su momento, generaron malestar entre la afición perica, pero que con el paso del tiempo han adquirido un sentido aún más profundo, a medida que se han confirmado las deficiencias de un modelo que nunca llegó a despegar.
Ahora, pese a las dificultades y a pasar dos veces por Segunda desde su marcha, Quique Sánchez Flores es optimista respecto a las opciones de permanencia de este Espanyol: “Me gusta, creo que ha pasado el tramo inicial en que sufren mucho los equipos que se construyen en el último momento; los equipos que económicamente están peor se acaban construyendo cuando ya han pasado tres jornadas de competición, porque el cierre de mercado esta muy por detrás del inicio de LaLiga. Estos equipos sufren mucho en los comienzos, porque no tienen cerradas las plantillas, mejores o peores, pero no las tienen cerradas. En ese tramo el Espanyol me dejó muchas dudas, luego Manolo González va consiguiendo llevar el equipo a donde él quiere, la afición está conectándose, han hecho cosas interesantes, es un equipo más cuajado, más difícil, defiende mejor. Y en ataque parece que ha encontrado un complemento para Puado que puede ser interesante, y un chico en el centro del campo que jugó muy bien su primer partido y puede ser una pieza importante”, en referencia a Roberto Fernández y Urko, respectivamente.