Se acabó lo que se daba. El Espanyol cierra este jueves su pretemporada 2025 enfrentándose al Newcastle United, en el que será el último test antes del arranque liguero ante el Atlético de Madrid. Será una buena piedra de toque, la más dura de todo el verano. Tras dejar muy buenas sensaciones en tierras alemanas con victorias como la cosechada en Berlín gracias a un penalti de Puado, el conjunto de Manolo González se medirá ahora a un rival de Champions que no está precisamente para bromas. Será el examen final para los pericos, que llegan con un buen balance da nivel de e resultados el equipaje… pero también con la sensación de que aún queda por ajustar más de una tuerca.
Un Newcastle potente… y con drama
Lo del Newcastle United es de novela. El proyecto que empezó a coger forma hace unos años con la entrada del fondo soberano saudí FIF vive ahora una etapa de consolidación en la élite europea. Campeones de la Carabao Cup en marzo (tras ganar al Liverpool por 1-2 en Wembley) y quintos en la última Premier League, los de Eddie Howe se han metido en Champions por segundo año consecutivo y van como un tiro… al menos sobre el papel. Porque el verano ha traído más ruido que calma. El culebrón Isak lo ha enrarecido todo. El delantero sueco, que no viajaba con la expedición de las urracas a la reciente gira asiática, quiere irse al Liverpool, que ha ofrecido 138 millones por él. Pero el Newcastle ha dicho que si alguien lo quiere, serán 150 millones de libras o nada. Así de claro.
En ese contexto, Howe ha sido tajante. “Somos el Newcastle United”, soltó el míster, molesto con la actitud de Isak. “Tienes que ganarte el derecho a entrenar con nosotros”, añadió. Sin paños calientes. A día de hoy, el tema sigue en punto muerto, con el jugador deseando marcharse y el club haciendo de muro. Y, mientras tanto, el equipo sigue con su preparación. Sin Isak, sí. Pero con jugadores como Bruno Guimarães, Anthony Gordon o Sandro Tonali, y con un bloque trabajado que sabe a lo que juega. El equipo inglés disputa su sexto amistoso de los siete programados para recuperar su forma física y ritmo. Sin embargo, su dinámica no es positiva: de los cinco partidos disputados, sólo han ganado uno: el primero, contra el Carlisle United (4-0). Desde entonces, han perdido tres (4-0 frente al Celtic, 3-2 ante el Arsenal y 1-0 ante el K-League Stars coreano) y empatado uno contra el Tottenham (1-1). Pese a todo, para el Espanyol será un auténtico reto.
El Espanyol, en busca del último paso
El equipo de Manolo González de llega al duelo de Sant James’ Park con ganas de seguir construyendo. Se ha visto evolución en las últimas semanas, una idea de juego más asentada y algunos nombres que empiezan a destacar. El triunfo ante el Union Berlin fue una muestra de ello: solidez atrás, buena actitud, y ese puntito de efectividad que tantas veces marca la diferencia. Muchos futbolistas siguen ganando puntos y otros llamados a ser importante asumiendo galones, pero aún queda. Y ante un rival como el Newcastle, cualquier desajuste se paga caro.
Será también una buena prueba para ver cómo se mide el Espanyol a un rival de entidad real, no ya por el escudo, sino por ritmo, físico y calidad. La temporada oficial arranca en nada y esta es la última oportunidad para terminar de probar cosas, ajustar automatismos y coger confianza. A diferencia de otros veranos, no hay ansiedad ni urgencias, pero sí mucha exigencia. La afición ha respondido durante el verano, y ahora le toca al equipo devolver esa confianza con hechos. Lo del Newcastle no es un amistoso más. Es el cierre del verano… y el primer guiño a lo que vendrá.


