Todo el espanyolismo está pendiente de la renovación de Javi Puado, cuyo contrato con el Espanyol finaliza esta misma noche, 30 de junio a las 23:59. Aunque en las últimas horas han surgido algunos flecos económicos entre los agentes del jugador y la dirección deportiva, nadie en el club espera que el acuerdo se venga abajo. El acuerdo con Puado está sellado verbalmente desde hace días y responde a las condiciones económicas que el delantero había pedido para continuar. No obstante, aunque el contrato no se firme hoy, no es relevante a efectos reglamentarios, ya que el club puede ejecutarlo a partir de mañana mismo, 1 de julio, sin limitaciones gracias a hallarse dentro del marco de la regla 1:1 del control financiero de LaLiga.
¿Qué implica la regla 1:1?
La regla 1:1, vinculada al Límite de Coste de Plantilla Deportiva (LCPD), permite a los clubes en equilibrio financiero inscribir contratos sin restricciones salariales. Es decir, pueden hacer nuevas altas o renovaciones con mejora económica. En el caso de Puado, que ha venido cobrando unos 2,3 millones de euros, la renovación supondrá una subida hasta los 4 millones. Una mejora que no podría realizarse si el Espanyol no estuviese dentro de esa regla, ya que fuera de la misma el club estaría obligado a renovar al jugador como máximo por el mismo salario anterior, sin posibilidad de mejora.
¿Por qué el Espanyol está en regla?
El Espanyol ha logrado volver al equilibrio financiero gracias a dos factores clave, la ampliación de capital ejecutada el pasado día 27 y el pago de la cláusula de rescisión de Joan García, que fue abonada íntegramente por el FC Barcelona, una marcha traumática a nivel deportivo y emocional, pero de decisivo impacto a nivel financiero, permitiendo entre ambas operaciones que el club se sitúe dentro de los parámetros de sostenibilidad marcados por LaLiga.
