Álex Pérez cumple su segunda temporada al frente del primer equipo de voley de las SD Espanyol. En su caso, cuando aterrizó en el club, en verano de 2019, lo hizo bajando dos categorías para coger al grupo en Segunda catalana. Tras conseguir un merecido ascenso que, por la pandemia, no se pudo celebrar en la pista, ahora afronta junto a su equipo una temporada complicada por la pandemia en la que están a la espera de poder volver a competir.
-En primer lugar, ¿cómo se encuentra el equipo? ¿Estáis entrenando con normalidad?
Ahora estamos entrenando, aprovechando todos los días que podemos. Solemos hacer sesiones los sábados y domingos porque entre semana, entre las obligaciones de las jugadoras y el toque de queda, no hay tiempo. Estamos aprovechando todo lo que podemos para ir poniéndonos a tono por si en enero hay alguna novedad y puede empezar la competición, que estemos preparadas.
-¿Tenéis alguna noticia de la federación sobre cuándo podría volver la liga?
Estamos un poco a la expectativa, y más ahora con las fiestas. La federación y la UFEC se están moviendo para que se pueda entrenar más allá del toque de queda y para que vuelvan las competiciones tratando de que podamos volver a tener cierta normalidad. Y más aún en nuestro caso, ya que la Primera Catalana es una categoría que da acceso para jugar a nivel estatal en caso de ascenso y hay que determinar qué equipos jugarían la promoción.
-¿Cómo está viviendo el equipo esta situación, sin poder competir?
Las chicas están muy motivadas. Son ellas mismas las que piden volver a entrenar y aprovechar todos los días que podamos. Tienen ansias por volver a competir y jugar. Al equipo lo veo bastante bien, bastante motivado. Aun así, con todo lo que hemos hecho, se nos nota un poco la falta de rodaje y de competición. Pero tenemos una plantilla bastante completa y compensada. El nivel es bastante bueno y estoy seguro que cuando haya que volver estaremos a la altura.
-¿Te sorprendió lo bien que empezasteis la liga siendo un debutante en la categoría?
Nuestro objetivo este año es la permanencia para asentarnos en la categoría, porque el cambio de Segunda a Primera catalana no es fácil. Sin embargo, no nos cerramos la puerta a nada, porque somos una buena plantilla y porque creo que trabajando duro podemos estar arriba. Es cierto que el inicio fue bastante bueno: ganamos con contundencia en Lleida, contra el Rubí perdimos ante un equipo consolidado, y en el tercer partido ante el Gavà también dominamos. Somos conscientes de que podemos estar ahí, pero aunque suene a tópico la idea es seguir partido a partido, entrenando cada semana duro para continuar optando a estar arriba del todo.
-Esta temporada ha habido muchas novedades en el equipo, ¿qué crees que se ha ganado respecto al pasado curso?
Por un lado, es cierto que se ha ganado en veteranía y experiencia en esta categoría e incluso en superiores, pero creo que sobre todo ahora hay más competitividad sana en el grupo. El equipo no ha parado de subir el nivel y la dinámica es mucho más activa. Esto hace que las jugadoras a nivel individual vayan creciendo. Además, tenemos a gente joven, con jugadoras juveniles que ya están integradas en el primer equipo. Esta combinación de experiencia y juventud hace que seamos un equipo más potente y ayuda al crecimiento grupal e individual.
-Es tu segunda temporada en las SD Espanyol, ¿cómo ves el proyecto por recuperar el voley perico?
Cuando entré el curso pasado, ya me ofrecieron llevar el sénior y el juvenil. Del año pasado a este, creo que seguimos creciendo en número de jugadoras de base y también en la mejora que están teniendo muchas de ellas. Nos gustaría que toda esa base vaya subiendo al primer equipo y no tener que buscar jugadoras fuera. En este sentido, estamos bastante contentos por estas jugadoras del juvenil que ya se han incorporado al sénior. Año tras año, esta idea se va consolidando y la base aporta más al primer equipo. Esto también enseña a las más jóvenes que es posible llegar.
-¿Cómo te convencieron para entrar en este proyecto?
Yo estaba entrenando en Primera nacional con el Molins. Por un lado, buscaba un cambio de aires, pero también es verdad que ya venía siguiendo el proyecto desde el principio. El Espanyol era un equipo mítico, una referencia en el voley, que había ganado Superligas y Copas de la Reina. Me llamó un día Roberto Illgen (director deportivo) para consultarme cómo lo veía y al poco ya me presenté en Sagrat Cor y acepté. Me hace mucha ilusión intentar devolver al Espanyol a las máximas categorías. A medio plazo, la intención es colocar al equipo en categorías estatales, en unos dos o tres años.
-A nivel mediático, lucir el nombre y los colores del Espanyol os debe dar más reconocimiento, ¿no?
Sí, aunque somos Seccions y está la lucha con el club por el reconocimiento, al final la gente cuando lo ve desde fuera nos identifica con el Espanyol. Nos pasó, por ejemplo, en la Copa de España, a la que acudimos el año pasado con el juvenil. Esto siempre te da un plus.
Soc un veterà soci de l'Espenyol i recordo el club jugant hockey, basket, volley, rugby, etc. fent un bon paper en totes les competicions. Finalment la questió económica va fer desapareixer les seccions. Una pena.