Sergi Darder no es de los que esconden lo que piensan. El mallorquín, ahora en las filas del RCD Mallorca, vivió un partido especial ante el Espanyol, equipo en el que pasó seis temporadas y donde llegó a ser capitán e ídolo de la afición. Y aunque celebró los 40 puntos que suma su equipo y su asistencia a Asano en el empate, no pudo evitar reconocer que le dolió ver a sus ex compañeros frustrados con el arbitraje.
“No puedo negar que estoy contento, aunque es jodido ver a amigos en el vestuario del Espanyol así”, admitió Darder tras el encuentro. Y es que el partido en Son Moix dejó mucha polémica, hasta el punto de que el Espanyol ha presentado una queja formal por el arbitraje, con su director deportivo, Fran Garagarza, pidiendo “respeto” y asegurando que “esto no es fútbol”. Darder, que conoce bien la historia del club perico con los colegiados, no se sorprendió: “Pasa el tiempo y te identificas con lo que han pasado. Estuve seis años allí y sé que es un club que nunca ha tenido mucha suerte con los árbitros, es la realidad”.
El centrocampista, eso sí, quiso matizar que en el Mallorca tampoco han estado exentos de decisiones arbitrales complicadas esta temporada: “Nosotros tampoco hemos tenido mucha suerte este año. Pero claro, cuando ganas parece que te olvidas de todo”. Lo cierto es que esta vez la balanza cayó del lado bermellón, algo que Darder celebró sin olvidar su pasado perico: “Estas acciones han salido de nuestro lado, estoy contento porque me debo al Mallorca y tener 40 puntos es una locura. Pero es verdad que tengo una sensación jodida por ver a amigos dolidos en el vestuario, enfadados como es normal, yo también lo estaría”.
Los pitidos que recibió en Son Moix por parte de la afición perica desplazada fueron otra historia dentro del partido. Algo similar ya le ocurrió en la primera vuelta en Cornellà, donde su salida no ha sido olvidada por todos. “Es un partido diferente, por mucho que intentes estar tranquilo siempre es algo diferente”, explicó sobre su reencuentro con el Espanyol. En lo futbolístico, reconoció que fue un choque complicado: “No me lo ha puesto fácil el partido, no había espacio y ellos cerraban bien. Hasta que han marcado y nos hemos crecido un poco y hemos sido más valientes, nos ha costado”.
Darder, que en el pasado fue voz autorizada en el vestuario blanquiazul, dejó claro que entendía la indignación del Espanyol. “Algún partido como este habré vivido, pero no lo recuerdo. Siempre hay partidos raros. También hay que valorar que además del arbitraje hemos hecho un buen partido y hemos sido superiores”, concluyó.
Fuente: Tiempo de Juego de COPE
