La relación entre Sevilla y Betis no pasa por su mejor momento. Lejos de las cordiales relaciones de los últimos años, el Sevilla ha marcado un antes y un después esta misma mañana con un comunicado en el que anuncia la ruptura de relaciones entre los clubes. Ahora, parece que va a comenzar una nueva etapa que recordará a épocas de antaño, como cuando Del Nido y Lopera estaban al frente de ambas instituciones.
“El Sevilla entiende que el comportamiento de los dirigentes del Real Betis Balompié denunciando la celebración de los jugadores sevillistas y haciéndolo además ante los organismos federativos y no ante la Comisión Antiviolencia rompe un importante código y sienta un peligroso precedente, ya que busca castigos deportivos a través de hechos no deportivos”, abría el comunicado del club hispalense. El Sevilla quiso dejar claro el motivo de su malestar: “Se considera que los hechos denunciados por los dirigentes del Real Betis Balompié están en el contexto de una celebración de un partido de la máxima rivalidad, en campo propio, y sin objeto ofensivo ninguno, y no entiende que puedan ser interpretados como generadores de violencia. Sorprende que el club verdiblanco no entienda estos sucesos en el marco de la rivalidad y una sana deportividad sevillana. Y sorprende igualmente la decisión de los Comités Federativos sancionando deportivamente estos hechos, instaurando un peligroso precedente en todo el fútbol español”. Al final del comunicado, el club anunciaba la ruptura de relaciones de forma contundente: “nuestra entidad ha decidido cortar las relaciones con el Real Betis Balompié, pues no entendemos que tales relaciones puedan seguir vigentes cuando los dirigentes de la entidad verdiblanca han buscado deliberada y conscientemente el daño de nuestro club”.
Este comunicado ha llegado en reacción a las palabras de Ángel Haro en la pasada junta de accionistas del Betis. Estas fueron las palabras del presidente del Betis: “El Betis no denunció, solo puso en conocimiento de los Comités las imágenes. Los responsables son las personas que cometen el hecho punitivo, sería tremendo que la responsabilidad sea nuestra. El Betis va a seguir con el mismo talante pero va a ser muy taxativo cuando se atente contra los símbolos del club. Estamos cansados de que cuando pasan cosas en el barrio de Nervión sea sevillanía y que cuando pasan en el campo del Betis prácticamente estamos cometiendo un crimen de estado. Siempre voy a tener un talante de educación pero los símbolos no se van a tocar”. Estas palabras eran la reacción al comunicado que publicó el Sevilla horas antes en relación a la sanción impuesta a varios de sus jugadores tras la polémica del derbi: tras finalizar el derbi del pasado 6 de octubre, el Betis denunció una imagen que se tomaron varios jugadores del Sevilla con una bandera en la que se veía la efigie del escudo bético tachada con un símbolo de prohibición. El resultado de la denuncia provocó la sanción de Isaac Romero, Juanlu y Carmona. Estas sanciones hicieron al Sevilla sacar un comunicado que acabó respondiendo Ángel Haro de esta manera. Estas palabras han sentado mal en Nervión y se ha hecho público el comunicado de la ruptura entre clubes.
Ahora, con las relaciones institucionales rotas, se espera que los dirigentes del Sevilla no acudan al derbi de filiales del próximo fin de semana. Veremos como evoluciona la situación y si el Betis, por su parte, decide responder a su máximo rival.
ℹ️ Comunicado oficial: relaciones con el Real Betis Balompié. #WeareSevilla
— Sevilla Fútbol Club (@SevillaFC) December 18, 2024
Este es el comunicado completo del Sevilla:
“El Sevilla FC, a la luz de la denuncia del Real Betis Balompié que provocó que tres de sus jugadores, Isaac, Juanlu y Carmona, fueran suspendidos en el partido ante el Celta de la pasada jornada, quiere comunicar:
-Que entiende que el comportamiento de los dirigentes del Real Betis Balompié denunciando la celebración de los jugadores sevillistas y haciéndolo además ante los organismos federativos y no ante la Comisión Antiviolencia rompe un importante código y sienta un peligroso precedente, ya que busca castigos deportivos a través de hechos no deportivos.
-Que considera que los hechos denunciados por los dirigentes del Real Betis Balompié están en el contexto de una celebración de un partido de la máxima rivalidad, en campo propio, y sin objeto ofensivo ninguno, y no entiende que puedan ser interpretados como generadores de violencia. Sorprende que el club verdiblanco no entienda estos sucesos en el marco de la rivalidad y una sana deportividad sevillana. Y sorprende igualmente la decisión de los Comités Federativos sancionando deportivamente estos hechos, instaurando un peligroso precedente en todo el fútbol español.
-Que el Sevilla FC ha dado sobradas muestras de tener altura de miras en casos similares, como cuando jugadores o incluso directivos del Real Betis Balompié se mofaron públicamente de jugadores del Sevilla FC, entendiendo que ciertos excesos e incluso ofensas debían quedarse en el contexto de las celebraciones, por más que fueran muestras de falta de educación y decoro.
-Que el Sevilla FC considera que los dirigentes del Real Betis Balompié no han estado a la altura de las circunstancias, de la institución a la que representan ni de su afición, que ha sabido interpretar mucho mejor la situación que nos ocupa; institución y afición a las que el Sevilla FC muestra, como siempre, su total respeto.
-Que el Sevilla FC entendía pasados y olvidados este tipo de comportamientos y de reacciones de dirigentes del Real Betis Balompié, más propias de otras épocas que de la actual, momento en el que entre ambas entidades reinaba la cordialidad.
-Que el Sevilla FC ha podido constatar que entiende de forma muy diferente las relaciones entre ambos clubes, que debieran ser de cordialidad y respeto dentro del sano marco de nuestra rivalidad deportiva. Marco que el Real Betis Balompié ha decidido transgredir de forma decepcionante para buscar beneficios deportivos más allá de los terrenos de juego.
Es por ello, que nuestra entidad ha decidido cortar las relaciones con el Real Betis Balompié, pues no entendemos que tales relaciones puedan seguir vigentes cuando los dirigentes de la entidad verdiblanca han buscado deliberada y conscientemente el daño de nuestro club. Ese, y no otro, hacer daño y perjudicar deportivamente al Sevilla FC, era el objeto de denunciar comportamientos extradeportivos ante tribunales de competición. Consecuencias que bien conocían en la entidad verdiblanca.
El Sevilla FC, por último, quiere reiterar su decepción por la inapropiada actitud de los dirigentes del Real Betis Balompié, no ya para con otro club, sino sobre todo para con el Sevilla FC. Y también su decepción con las decisiones de los comités federativos, decisiones que, además, aunque a posteriori y fuera del plazo de la sanción, han sido suspendidas cautelarmente por la justicia ordinaria”.
