Urko González de Zárate es de esos futbolistas que no hacen ruido pero que terminan marcando diferencias. Formado en Zubieta, aprendió a mirar el fútbol con los ojos de Xabi Alonso. Hoy, asentado en el Espanyol y con contrato por cinco temporadas, se reencuentra con su maestro en un escenario de vértigo: el Santiago Bernabéu. Allí, el equipo blanquiazul busca romper una racha de 30 años sin ganar. Sobre todo ella reflexiona en una charla con Roberto Rodríguez, periodista de La Vanguardia.
“Somos una piña”
El arranque del Espanyol ha sido impecable: diez puntos de doce posibles. Urko lo explica con naturalidad: “Trabajamos mucho en el día a día y hay un muy buen grupo, somos una piña”. Dentro del vestuario el discurso es claro: “Tenemos que seguir así, trabajando y con los pies en el suelo. La temporada es muy larga, pero estamos todos muy contentos. Son 10 de 12 puntos y el arranque es muy bueno”.
Paciencia como escudo
El vitoriano sabe bien lo que significa esperar su momento. “En el fútbol tienes que ser muy paciente porque muchas veces no depende solo de ti”, confiesa. En la Real, apenas tuvo oportunidades. “Esto lo he hablado mucho con mi padre en casa, porque sí que mi experiencia en la Real fue bonita, pero a la vez fue muy dura, porque prácticamente no contaban conmigo. Pero lo que mi padre me decía era que tenía que entrenarme y estar preparado”.
“Aquí me sentí importante”
Su fichaje por el Espanyol volvió a hacerle sentirse valorado. “Sobre todo mucha confianza. En la Real no había jugado nada. Aquí me sentí importante”. El recibimiento, además, fue cálido: “Cuando llegué me acogieron muy bien. Me sorprendió mucho. Y cuando me fui parecía que los conociera de toda la vida. Aquí hay una familia, y el grupo es la clave de todo”.
Manolo, clave en su crecimiento
No duda al hablar de su técnicor. “Manolo es muy buen entrenador. Además es muy buena persona. Te aprieta cuando te tiene que apretar, pero en el día a día te pregunta mucho qué tal estás, es muy cercano”.
El reencuentro con Xabi Alonso
La entrevista tenía una cita obligada: Xabi Alonso, con el que se reencuantra sentado en el banquillo del Real Madrid. “Xabi fue muy importante en mi carrera. Estuve dos años con él y aprendí muchísimo. Fue un jugador muy bueno y también ahora como entrenador se está viendo lo bien que lo hace. Me alegro de que le vaya bien”. Recuerda sus entrenamientos extra: “Al ser mediocentro alguna vez me quedaba con él después de los entrenamientos para hacer golpeos largos. No veas, él tenía el mejor golpeo, de los mejores que he visto”.
Urko cree que Xabi tiene lo necesario para gestionar el vestuario blanco: “Él está por encima de eso. Al final él es entrenador y lo que el entrenador dice va a misa. Aparte tiene mucha personalidad y estoy seguro que lo va a llevar muy bien”.
“Vamos al Bernabéu a por los tres puntos”
El centrocampista no se esconde cara al partido de esta tarde en el Bernabéu ante un Madrid al que ganó ya en casa en su estreno como titular en el once perico: “Guardo un recuerdo muy bonito de la primera vez que jugué aquí. Encima ganamos al Madrid. En cuanto a lo de hoy, evidentemente sabemos el rival que es, pero tenemos muy buena plantilla y vamos allí a pelear para poder traer los tres puntos”. Y añade: “No, no tengo ningún miedo. Vamos a hacer nuestro partido”.
Dolan, la sorpresa del vestuario
De entre los fichajes, hay uno que le ha impactado: “Te diría Dolan. Me sorprendió porque no lo conocía y… ¡es una guindilla!, es muy buen jugador”.
De Busquets a Xabi Alonso
Sus ídolos siempre fueron de la misma zona del campo. “Me fijaba en Xabi Alonso, pero sobre todo me gustaba Busquets. Siempre decía los dos”. ¿Similitudes? Urko lo tiene claro y se ríe: “La altura únicamente. Sí que me gusta tener el balón, pero ellos han sido muy buenos. La altura te lo puedo comprar, es lo único”.
