El RCD Espanyol ha querido hacer del año de su 125º aniversario un punto de inflexión, no solo a nivel institucional y deportivo, sino también en el plano emocional. La campaña de abonos lanzada esta semana, bajo el lema “Amor Indestructible”, ha venido acompañada de una pieza audiovisual que no ha tardado en generar un notable impacto en la comunidad perica. El vídeo, concebido como un homenaje a las familias que han sostenido al club generación tras generación, ha recibido una acogida entusiasta por parte de la afición.
A través de una narrativa intimista y visualmente muy cuidada, la pieza repasa la historia de una familia espanyolista desde principios del siglo XX hasta la actualidad. El relato se construye en torno a cinco generaciones que comparten un mismo sentimiento: el de pertenencia al RCD Espanyol. El resultado es un recorrido emocional que conecta con quienes han vivido el club como una tradición familiar, transmitida con orgullo y convicción más allá de los vaivenes deportivos.
El vídeo se apoya en imágenes que evocan distintas etapas históricas del Espanyol y de la ciudad de Barcelona, con escenas ambientadas en talleres de época, plazas llenas de niños jugando a fútbol, y estadios que han marcado épocas. Algunas de estas imágenes han sido reconstruidas o dotadas de movimiento mediante herramientas de inteligencia artificial, en un ejercicio de recuperación visual tratado con extremo cuidado y respeto por la memoria histórica.
Lejos de centrarse en figuras individuales o momentos de éxito deportivo, el mensaje que transmite la campaña gira en torno a la idea de que el auténtico motor del club ha sido, es y seguirá siendo su gente. Un legado que no se construye solo con títulos, sino con el compromiso silencioso de miles de personas que han mantenido viva la llama blanquiazul incluso en los momentos más complejos.
La reacción no se ha hecho esperar. El vídeo ha sido ampliamente compartido en redes sociales, acompañado de mensajes de emoción y reconocimiento por parte de socio y aficionados. Muchos han destacado el tono respetuoso y profundamente humano de la narración, así como la sensibilidad con la que se ha tratado el vínculo afectivo que une a tantas familias con el Espanyol.
Desde el club se ha querido agradecer públicamente la implicación de decenas de pericos y pericas que han compartido sus historias, recuerdos y materiales para dar forma a esta iniciativa. La campaña, tal como han explicado fuentes del Espanyol, aspira no solo a incentivar la renovación de abonos, sino también a reforzar el sentido de comunidad en un momento simbólico como el 125º aniversario.
El Espanyol lanza así un mensaje claro: en una época en la que el fútbol tiende a despersonalizarse, el sentimiento blanquiazul permanece como un hilo inquebrantable que atraviesa generaciones. Y esta campaña no solo lo reivindica, sino que lo celebra con el orgullo que merece la ocasión.