El Espanyol está viviendo una temporada de infarto en su lucha por la permanencia, y a los desafíos habituales a nivel competitivo se le ha sumado un factor totalmente inesperado: el clima. En lo que va de curso, el conjunto perico ha visto cómo se le aplazaban dos partidos, ambos contra equipos de la Comunidad Valenciana y por el mismo motivo, los efectos de las condiciones meteorológicas adversas. Primero fue el duelo ante el Valencia en el RCDE Stadium; ahora, el enfrentamiento contra el Villarreal en La Cerámica también ha tenido que suspenderse, y ahora tocará encontrar un acuerdo para que finalmente pueda disputarse.
El Espanyol – Valencia de la jornada 13, aplazado en su día por la DANA
El primer aplazamiento se dio en la jornada 13, cuando el Comité de Competición de la RFEF decidió suspender el Espanyol – Valencia que debía disputarse en el feudo perico. En su comunicado, el Comité argumentó que la situación que atravesaba la Comunidad Valenciana por la DANA constituía un caso claro de “fuerza mayor”. Además, señaló que la RFEF no podía ser ajena a la extrema necesidad, urgencia y angustia que vivían los afectados, por lo que aceptó las solicitudes de suspensión. El Valencia también emitió un comunicado en el que recordaba que “tan solo había pasado una semana desde que se produjera la catástrofe de la DANA y la situación seguía siendo muy grave”. El club agradeció la comprensión de LaLiga, la RFEF y sus rivales; finalmente, el encuentro se reprogramó para el 18 de diciembre y como decimos, terminó en empate.

La historia se repite con el Villarreal – Espanyol: suspendido por las condiciones climatológicas
Ahora, la historia se repite con el partido ante el Villarreal, que tampoco ha podido disputarse en la fecha prevista debido a las inclemencias meteorológicas; la suspensión llegó en este caso no con suficiente antelación sino en el último minuto, en una decisión que algunos tildan de insólita y que está generando cierta polémica. LaLiga y la RFEF comunicaron el aplazamiento a las 21:07, cuando el partido debería llevar unos minutos en juego, y además con más de 10.000 aficionados en la grada del estadio groguet. Cuando la megafonía anunció la decisión el público reaccionó con evidente malestar. El motivo fue la alerta de Emergencia 0 decretada por la Generalitat Valenciana debido a las fuertes lluvias en la provincia de Castellón, aunque en Vila-real la situación no parecía tan extrema. De hecho, todo apuntaba a un partido normal, con calentamiento completado, alineaciones presentadas y los jugadores esperando en el túnel de vestuario junto a las mascotas en adopción que iban a ser portadas por ambos capitanes. Sin embargo, a las 21:00 se informó del primer retraso y, apenas siete minutos después, llegó la suspensión definitiva. La sorpresa fue generalizada.

Una decisión que cogió a todos por sorpresa
El Villarreal no hizo declaraciones a nivel oficial, pero el malestar de sus dirigentes era más que evidente. Por parte del Espanyol, su director deportivo, Fran Garagarza, expresó la incredulidad de la expedición blanquiazul ante una suspensión que “nos ha pillado por sorpresa. A diez minutos de empezar nos avisaron de que se suspendía”.

5 días para pactar una nueva fecha para el Villarreal – Espanyol: se habla del 2 de abril
Ahora, ambos clubes deben pactar cuándo y cómo se reprogramará el encuentro; hay 5 días hábiles para que se pongan de acuerdo en la nueva fecha. Aunque todavía no hay confirmación oficial, anoche se hablaba del 2 de abril como la fecha elegida para recuperar el choque en La Cerámica. Garagarza también explicaba en su atención a los medios desplazados que en el Espanyol no tienen ninguna idea aproximada de cuando se podrá jugar la cita en La Cerámica. “Una vez que cien por cien nos han comunicado la suspensión, es lo primero que he preguntado. Nos han dicho que no lo saben ni ellos. Es obvio que mañana es inviable, el parte es incluso peor que el de hoy. Es una pregunta que corresponde hacerla pero no hay respuesta. No puedo decir, no depende de nosotros”, insistiendo en que la decisión de no jugar “es de LaLiga y la Federación”.

Un calendario más congestionado para el Espanyol
Estos aplazamientos no son una mera anécdota, ya que pueden afectar de una manera importante al calendario de una temporada ya suficientemente compleja. Para el Espanyol la acumulación de partidos puede ser un arma de doble filo, en el sentido que puede derivar en un calendario congestionado en el tramo final de la temporada, con menos margen de recuperación y una presión añadida en el caso de que los resultados en los partidos anteriores no sean todo lo positivos que se desea.
En este contexto, Manolo González y su equipo técnico tendrán que responder a estos imprevistos con acierto, dosificando esfuerzos y evitando que el equipo llegue sobrecargado a momentos clave en los que habrá sin duda mucho en juego. En el tramo final y decisivo del curso cualquier detalle puede marcar la diferencia, y el calendario, alterado como vemos a lo largo de la temporada por el clima, ha añadido un nuevo elemento de incertidumbre a la ecuación.
