Miles de personas jubiladas que solicitaron la devolución del IRPF a través del formulario con el que la Hacienda ha habilitado a tal efecto, se encuentran con grandes dificultades para recuperar su dinero. A pesar de que el Tribunal Supremo reconoció en febrero de 2023 que los mutualistas que tributaron de forma efectiva entre 1967 y 1978 tienen derecho a recuperar parcialmente el IRPF que llegaron a pagar en exceso, la cuestión parece que ha quedado paralizada.
La Agencia Tributaria, que al inicio había hecho la devolución posible sólo durante los cuatro años (2019-2022) que no habían prescrito y en virtud de un formulario específico, ahora reclama que las personas jubiladas lo hagan por cada año en el que asuma que tiene que reclamar el IRPF. Esto implica que las devoluciones se irán sucediendo hasta 2028, nuevo aspecto que ha causado malestar y desconcierto en las personas afectadas.
Nuevo plan de Hacienda: devoluciones fragmentadas hasta 2028
Los expertos en fiscalidad, a raíz, sobre todo, del monto de la obligación por devoluciones, que podría ser incluso de 1.700 millones de euros más de la cantidad que los Presupuestos Generales del Estado preveían inicialmente, dan cuenta de que el Gobierno optó por desistir de las reclamaciones abiertas. Hasta noviembre de 2024, la Agencia Tributaria había devuelto 1.379 millones de euros a los pensionistas que tributaban en virtud de mutualidades antiguas.
Sin embargo, el cambio normativo parece una opción con la cual el Ejecutivo intenta esquivar, a lo largo, las deformaciones de las cuentas públicas en el caso de que se devuelva el importe correspondiente a 2019. Con esta fórmula, los jubilados tienen que presentar el correspondiente formulario que estará dispuesto durante la campaña de Renta de 2025 para pedir el dinero de la devolución de 2019. Desde ese año, las devoluciones se producirán de forma acumulada: 2020 en 2026, 2021 en 2027, 2022 en 2028 e incluso se ha suprimido la opción de pedir devoluciones mediante rectificación de liquidaciones.
Los miembros del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) han criticado esta acción afirmando que la dilación así como la burocratización del proceso perjudicará a los jubilados y algunos de ellos pueden perder la facultad de reclamar la devolución. “Y si se va tomando la determinación de no devolver, mejor, así saldré menos beneficiado el fisco”, bromean.
Piden a Hacienda reconsiderar la medida
La modificación ha originado justificada indignación en las personas que se han visto afectadas y los profesionales que han intervenido para gestionar la tramitación de las solicitudes. Agustín Fernández, presidente del REAF y Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas (CGE), han planteado de forma oficial al Ministerio de Hacienda la voluntad de retirar el cambio.
«El mutualista que ha utilizado el formulario online está en una situación injusta frente al que ha solicitado la devolución de su cuota por las vías tradicionales», comentan.
Además, advierten que, el hecho de que el plazo de la solicitud se incrementa de forma significativa, está afectando a personas mayores, de modo que termine en manos de los herederos y con efecto directo en el retraso burocrático. Mientras tanto, Hacienda dice que la modificación quiere asegurar un mejor reparto controlado de los fondos evitando un impacto importante en el presupuesto anual.
Quiénes tienen derecho a la devolución
Los retornos de IRPF corresponden a mutualistas que contribuyeron entre los años de 1967 a 1978. En estos casos, Hacienda debe devolver hasta el 25 % del IRPF de la prestación por jubilación devengada en ese periodo. Esto es así, dado que dichas aportaciones no fueron deducibles en su momento. En el caso de las contribuciones previas a 1967, dicha devolución corresponde al 100 % del IRPF, por la pensión generada en ese periodo.
Pero nos encontramos con el caso de los jubilados que reclamaron su devolución de IRPF mediante la rectificación de las declaraciones, los cuales han recibido con mayor frecuencia la devolución, en comparación con aquellos jubilados que confiaron en la web. Eso ha originado una evidente desigualdad en su trato, acentuando el sentimiento de injusticia entre los denunciantes.
Por lo que está en boca de muchos pensionistas que deseaban que el proceso fuera ágil y sencillo. Mientras tanto, los expertos piden que Hacienda modifique la normativa en aras a facilitarlo y asegurar así el cobro efectivo por parte de los jubilados de lo que les toca por derecho y sin demoras ni complicaciones al respecto.