La pensión de orfandad es importante para muchos niños y jóvenes que pierden al cónyuge que les sostenía económicamente. Si bien perder a una madre o a un padre es un hecho muy duro, hay que tener además en cuenta que algunas de estas personas pierden a los dos al mismo tiempo en ocasiones, por ejemplo, en un accidente.
Aunque este caso no es muy común, hay que tener en cuenta que cuando se da estos niños, adolescentes o jóvenes están en una situación extrema, sobre todo si no cuentan con familiares o seres queridos que puedan hacerse cargo de ellos económicamente.
Es por eso que existe la pensión de orfandad y es importante que los afectados por la muerte de su madre o padre la puedan recibir hasta que cuenten con unos ingresos propios.
Lo que se ha de cumplir para una pensión de orfandad
En el caso de la pensión de orfandad, aunque se deben cumplir unos requisitos como ocurre en el caso de otras ayudas y subsidios, se tiene en cuenta la situación de la persona fallecida para establecerlos y no la de la persona que recibe la pensión de orfandad.
En función de la causa que determina la muerte y la situación laboral en la que se encontraba el fallecido, la manera en la que se percibe la pensión de orfandad puede cambiar. En algunos casos se debe acreditar un período mínimo de cotización.
Cuando la persona fallecida estaba dada de alta o en situación similar en el Régimen de la Seguridad Social, no se da una exigencia en cuanto al periodo mínimo de cotización que se debiera tener cumplido por su parte. Esta excepción también se da cuando el fallecido muere a causa de un accidente o enfermedad profesional.
Cómo solicitar la pensión de orfandad y cuantía
La cuantía de esta pensión se establece teniendo en cuenta la base reguladora de la persona fallecida y suele ser de un 20% sobre esta. Eso sí, en los casos en los que ninguno de los progenitores del beneficiario de la pensión de orfandad ha sobrevivido, como puede ser cuando se dan accidentes que afectan a ambos la cuantía es superior.
Y es que en estos casos y cuando los solicitantes no tienen la opción de ser sostenidos por otras personas o seres queridos, se tiene en cuenta que se pueden encontrar en una situación crítica y es por eso que se da una excepción. La pensión de orfandad se puede solicitar durante los tres meses inmediatamente después de la muerte del progenitor o progenitores. Se abona con carácter retroactivo y el plazo máximo de retroactividad es de hasta tres meses.
En la mayoría de los casos la pensión de orfandad se abona desde el día siguiente a la fecha del hecho causante de la misma, teniendo en cuenta también la urgencia que muestran algunas situaciones.
La edad hasta la que puedes percibir
La edad hasta la que se puede percibir la pensión de orfandad son 21 años. Esto es porque se tiene en cuenta que las personas beneficiarias tienen, llegada esa edad, pueden trabajar o generar sus propios recursos sin depender de la ayuda. Eso sí, existen excepciones cuando la persona beneficiaria cuenta, por ejemplo, con una incapacidad que le coarta su propia capacidad de trabajo como puede ser un estado de gran invalidez.
Por otro lado es importante saber que los descendientes del fallecido pueden optar a la pensión de orfandad ya naciesen durante el matrimonio o el fallecido tuviera hijos con diferentes parejas. En el caso de que solo exista un progenitor y el beneficiario de la pensión de orfandad no tenga ingresos propios, la pensión se extenderá hasta los 25 años.
