Cuando vas a Pamplona sabes a lo que te expones. Partido bronco sin ocasiones, mucho juego subterráneo y sacrificio, mucho sacrificio. Por ello el Espanyol lleva sin ganar en El Sadar desde la temporada 2015-16. Y si hay ’empanadas’ como la que hubo en el único gol que vimos sobre el terreno de juego, todavía más.
No empezó mal el duelo, con un Espanyol que recuperó el 4-3-3 y que entró al campo muy serio tácticamente, con un Keidi Bare que puso más cemento al centro del campo y que lo logró. Porque en la primera mitad, el albanés y un equipo bien colocado secó al CA Osasuna, que solo llevaba peligro con Ez Abde ante un Fernando Calero que soñará con el extremo. Mira que lo tenemos dicho, Diego, que los jugadores en su posición… pero tú, erre que erre. Y luego pasa lo que pasa.
Pese a ello, en los primeros 45 minutos el Espanyol controló al CA Osasuna. Es más, gozó de las mejores ocasiones, con la dupla rufetana, Brian Oliván y Joselu, tratando de imitar el gol al que nos tienen acostumbrados y al ‘Lele’ Cabrera rematando con la chepa y obligando a Aitor Fernández a estirarse como un gato. Incluso se anuló un gol por fuera de juego (claro no, lo siguiente) al readmitido Aleix Vidal. Que, por cierto, se está dejando la piel por un equipo que lo tuvo todo el verano apartado. Profesional de arriba a abajo, sí señor.
Las sensaciones eran buenas ya desde el principio, cuando Benjamin Lecomte blocó el primer balón a los 30 segundos; tal y como está la situación en la portería perica, pocos nos esperábamos que acabara salvando el segundo en varias ocasiones. Pero, cómo no, la cosa cambio tras un error, una ’empanada’ monumental. Vini Souza, al que en tan buena consideración tiene el míster tal y como comentó en la rueda de prensa previa, repitió la del duelo ante el Valencia CF, dejó saltar a Budimir y ahí se acabó. En El Sadar, cuestión de aprovechar las que tienes.
Tuvo opciones el Espanyol, pese a perder el centro del campo con la salida de Keidi Bare y salvar Lecomte al equipo. Pero ni el goleador Joselu, ni el ‘novio ideal’ Puado, ni un Lazo que poco nos ha regalado hasta el momento pudieron encontrar el camino del gol ante un CA Osasuna que vive de esto: aprovechar sus ocasiones y defenderse como buenamente puede.
Un encuentro más decantado para el rival con un error individual. No tan grave como anteriores, pero al fin y al cabo, error. Tres puntos que vuelan y que instalan el nerviosismo de nuevo en Can Perico. Otra vez vuelve ese ‘olorcillo’ a final. Y esta vez, ante un Elche CF que se juega la vida. En solo tres días. Suerte que llega rápido, ya sea para bien o para mal.