Tan solo 11 puntos suma el Espanyol en 12 jornadas tras el empate logrado en el feudo del RCD Mallorca. Una cifra bastante baja y que hace temer lo peor a los pericos. El equipo, antes del parón por el Mundial, debe visitar al Atlético de Madrid y recibe al Villarreal CF, además de viajar a Málaga para enfrentarse al CD Rincón en la primera eliminatoria de Copa del Rey.
Pero no solo para el Espanyol la puntuación lograda es insuficiente. También, a nivel personal, para Diego Martínez. El entrenador gallego llegó al club blanquiazul con mucha ilusión de cara a hacer un gran curso y no se ha encontrado las herramientas necesarias para lograrlo. Además, los fallos grotescos están condenando al cuadro espanyolista, que sin ellos sumaría bastantes puntos más.
Esta es la octava campaña de Diego Martínez como entrenador en el mundo del fútbol profesional y nunca antes sumaba tan pocos puntos a estas alturas de campeonato liguero. El curso que más se asemeja es el de su debut en un banquillo profesional, el 2014-15. Esa campaña era el preparador del Sevilla Atlético en el grupo IV de la desaparecida Segunda división B y sumaba, tras 12 jornadas, 12 puntos. El filial hispalense acabó salvándose por un solo punto.
La campaña siguiente, también con el Sevilla Atlético y en la misma categoría, fue muy diferente. A estas alturas sumaba 21 puntos y estaba en ‘play-off’ de ascenso; el filial andaluz acabó tercero y logró subir a Segunda división. En la categoría de plata 12 jornadas le sirvieron para ser una de las sorpresas del campeonato con 20 puntos, los cuales situaban al equipo en la segunda plaza. Esa campaña el Sevilla Atlético acabó decimotercero, cinco punto por encima del descenso.
Llegamos al curso 2017-18, cuando Diego Martínez se hizo cargo de CA Osasuna en LaLiga SmartBank. 21 puntos en 12 jornadas permitían al cuadro rojillo ser cuarto, pero acabó la temporada fuera de los ‘play-off’ de ascenso por un punto. En la 2018-19, como entrenador del Granada CF, líder de Segunda división en la jornada 12 con 26 puntos y ascenso como segundo clasificado.
Ya en Primera división, de nuevo su Granada CF fue la revelación: sexto con 20 puntos tras 12 jornadas. Acabó el curso el cuadro nazarí séptimo, clasificándose para la Europa League por primera vez en su historia. En la 2020-21, de nuevo en el Granada CF, octavo con 18 unidades a estas alturas de competición liguera; acabó noveno y no quiso renovar.
Tras un año ‘sembrático’, como el propio Diego Martínez dijo en su presentación como entrenador del Espanyol, cogió las riendas del cuadro blanquiazul, pero las cosas no están yendo como se esperaba. De momento, su peor arranque como entrenador en el fútbol profesional. Que le dé la vuelta a la situación pronto.