La Renta 2025 está ya en curso y es importante saber cómo afecta la subida de las pensiones a la declaración. Hay que tener en cuenta que las pensiones tributan como rendimientos de trabajo, por lo que es obligatorio pagar impuestos por ellas siempre que se superen los límites establecidos por Hacienda. Por eso, siempre y cuando se perciba más de pensión, habrá que pagar más en la Renta y en algunos casos será entre el 19% y el 24% de IRPF.
Asimismo, los límites para tener que hacer la Renta afectan también y de igual forma a quienes cobran pensiones. Vamos a ver cuáles son estos límites para la Renta 2025, lo que pasa con el IRPF de las pensiones y cómo abordar este asunto.
Límites para hacer la Renta si se cobran pensiones
Como hemos dicho, los límites para tener que hacer la Renta si se cobran pensiones, son los mismos que en los casos en los que se cobran sueldos, ya que una pensión siempre tributa como rendimiento de trabajo. En el caso de quienes tienen un solo pagador, el límite para tener que hacer la Renta está situado en 22.000 euros. En el caso de quienes tienen dos o más pagadores, este límite está fijado en 15.876 euros y el segundo y siguientes han aportado más de 1.500 euros.
Lo que quiere decir que quienes cobran pensiones, pueden verse obligados/as a hacer la Renta si ahora superan ese límite. Para tomar un ejemplo concreto, en el caso de una persona pensionista que percibiese una cuantía de 1.300 euros mensuales en 2023 y no presentaba la Renta, ahora podría superar los 15.876 euros anuales después de la subida.
Sobre todo esto puede darse en los casos en los que se tengan ingresos adicionales, como es el caso de los rendimientos por alquileres u otras fuentes de ingresos. También para quienes cobran una pensión complementaria privada.
Cómo influye el IRPF en las pensiones
También es de vital importancia, aunque hayamos dejado claro que las pensiones tributan como rendimiento de trabajo, dejar claro cómo funciona el IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas) cuando hablamos de pensiones.
Lo primero que debemos valorar es que, al igual que los ingresos que provienen de sueldos y otras fuentes de ganancias personales, están sujetas a la retención de impuestos por medio del IRPF.
Estas retenciones se establecen acorde con factores personales y específicos en cada caso, como son la cantidad de pagadores que se tienen, las personas que forman la unidad familiar y la situación de la persona que cobra las pensiones en cada caso, como por ejemplo si es o no discapacitado/a.
A la hora de llevar a cabo las retenciones, la Seguridad Social procede a hacerlo automáticamente, según los datos que tiene de cada persona pensionista. Lo que ocurre es que en algunos casos los datos no están actualizados, o no reflejan correctamente la situación de la persona que cobra la prestación. Por este motivo, algunas personas jubiladas se encuentran teniendo que pagar cuantías inesperadas.
El IRPF que deben pagar los pensionistas
Más allá de lo que hemos comentado, es necesario saber cuál es el tramo exacto de IRPF que debe pagar cada pensionista. Estos son los tramos que hay fijados para esta Renta para las pensiones:
- Hasta 12.450 euros: 19%
- De 12.451 a 20.200 euros: 24%
- De 20.201 a 35.200 euros: 30%
- De 35.201 a 60.000 euros: 37%
- De 60.001 a 300.000 euros: 45%
- Más de 300.000 euros: 47%
Esto quiere decir que en el caso de las pensiones medias, que son de más o menos unos 1.400 euros mensuales, al ser de 16.800 euros anuales, sitúan a algunas personas que las reciben directamente en el segundo tramo.
